Una vida contigo (Link x Tú)

Figura materna

Link:

Entramos sin ningún problema a la Ciudadela Gerudo, observe a a mi alrededor, era increible, habia mujeres con sus puestos de comida y habia tiendas de ropa y joyeria, seguimos caminando hasta llegar a unas escaleras las cuales subimos y nos adentramos al lugar donde la imponente matriarca de las Gerudo, Urbosa, descansaba en su trono y a su lado su guardaespaldas Adine.

-Mi señora, la princesa Zelda de Hyrule solicita una audiencia con usted.- Decía la guardia que nos había escoltado en todo el camino mientras se arrodillaba.

-Ya veo... aceptaré su solicitud, déjenos solas por favor.- Dijo la matriarca con voz firme.

-Si, mi señora.-La guardia se retiro dejándonos delante de la matriarca.

-Princesa Zelda, es un honor tener su presencia en nuestra región.

-Matriarca Gerudo, Urbosa, agradezco su bienvenida.- Dijo la princesa con una leve reverencia.

-No hay nada de que agradecer princesa Zelda. Pero dígame, que la trae a nuestra región.

-Vera, en nombre del Rey de Hyrule usted a sido la elegida para pilotear a la bestia divina Vah Naboris para derrotar al cataclismo y traer la paz a Hyrule.

-Pilotear la bestia divina....... Vaya que es una gran responsabilidad, me siento alagada por ser la elegida para pilotear a Naboris. Soy una matriarca que se preocupa por su pueblo, ese es mi propósito, y si lo puedo expandir no solo con mi región sino con todo Hyrule, entonces no dudaré en hacerlo.

La princesa y yo nos quedamos viendo a la matriarca fijamente unos segundos hasta que finalmente habló de nuevo.

-Princesa de Hyrule, acepto su propuesta sin reserva alguna. El mismo Clan Yiga que pretende resucitar a Ganon también busca robar nuestro tesoro más valioso.-La matriarca dirigió su mirada a un casco que parecía de oro que estaba colocado cuidadosamente a un lado de la matriarca.

-Es por eso que me uniré a su noble causa.- Dijo finalmente la matriarca.

-Matriarca Gerudo, Urbosa... en nombre del Rey de Hyrule, se lo agradezco.- Dijo la princesa para luego hacer una leve reverencia, yo también hice lo mismo.

***

Nos reunimos con la matriarca Urbosa en la terraza de sus aposentos, tenía una vista increíble de toda la ciudadela. Estábamos sentados en el sofá que tenia mientras nos traía unas bebidas tradicionales de Gerudo.

-Y bien rayo de luz, cuéntame como te ha ido.- Dijo la matriarca dirigiéndose a Zelda con una voz calmada y feliz.

-Han pasado tantas cosas Urbosa, verás mi padre me ha encomendado la tarea de buscar a los elegidos para pilotear a las bestias divinas.- Dijo la princesa Zelda con voz feliz.

-Estoy muy orgullosa de ti.

-Gracias Urbosa.

Yo solo me quedaba callado escuchando la conversación mientras disfrutaba del "Noble afán", la deliciosa y refrescante bebida que nos había traído la matriarca Urbosa.

-Ahora tu cuéntame que ha sucedido aquí, recuerdo que me mencionaste algo sobre el Can Yiga.- Dijo la princesa dirigiéndose a la matriarca.

-Cierto, el Clan Yiga a aumentado sus intentos de robo por el Casco del Trueno, aquel casco es nuestro tesoro más valioso para nosotras las Gerudo, nos permite defendernos de los rayos, aunque solo yo puedo utilizarlo para defender a mi región esos necios siguen empeñados y convencidos de que también pueden usarlo ellos.

-Ya veo, ¿Pero nadie a salido herido?

-Por ahora no, pero siempre estamos alerta.

-Eso es bueno.