Excitación

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Guillermo no sabía por qué estaba tan duro como una roca en un momento así, se encontraba en una pequeña fiesta en celebración al cumpleaños del padre de Samuel, es más, justo en ese instante se encontraba en una mesa familiar con todos los De Luque, disfrutando de un delicioso almuerzo al aire libre, pero tenía a Samuel al lado que aprovechaba el gran mantel que cubría la mesa de madera para colar su mano bajo esta y acariciar la parte interna del muslo derecho de su novio.

Las provocaciones solo aumentaban con la cercanía de aquella mano al miembro de Guillermo, pero ahí no terminaban, Samuel le enviaba mensajes eróticos por el móvil, cosa que no podría decirle de frente estando toda su familia y a cada cual mensaje, más candente se volvía la situación hasta llegar al punto de tener Guillermo que ocultar un gemido al sentir el dedo índice del mayor rozar suave y lentamente sobre su miembro, enviando oleadas de placer que se traducían en sensaciones corrientosas que circulaban por su columna, obligándolo a arquear levemente la espalda que a vista de las personas presentes, solo era un acomodamiento en su silla y eso incrementaba tanto el morbo de la situación que ya Guillermo intentaba disimular su sonrojo detrás del delicioso filete con verduras que había servido.

La mano de Samuel de repente desapareció, pero tan pronto como se dio cuenta de ello una vibración movió el teléfono móvil de Guillermo.

"Estás tan duro y caliente, bebé."

"Quiero chupártela ahora y hacer que tu enorme falo llegue hasta mi garganta."

"Amo tu carita sonrojada, me dan ganas de hacer que con esa tierna boquita grites mi nombre mientras te penetro hasta el fondo."

"¿Qué te parecería correrte mientras mi familia canta el cumpleaños feliz? ¿No te parecería excitante hacerlo en público?"

Oh sí, Guillermo tenía un gran problema.

777 Sensaciones -Wigetta-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora