777 Sensaciones -Wigetta-

Pasión

Piel contra piel, roces candentes y gemidos llenaban la habitación de aquel par que pareciera que estuvieran dando lo mejor de sí en la cama.

Samuel besó a su novio mientras lo embestía profundamente, Guillermo se dejaba llevar por las sensaciones, soltando los sonidos que su garganta emitía y que hacía que el miembro que tenía en su interior palpitara con fuerza. Sus movimientos eran lentos, disfrutaban cada embestida, cada gemido, cada beso como si fuera el último, luchaban por llevar el control, pero el resto del acto era una sobrecarga de éxtasis que ni el más potente afrodisiaco pudiera lograr.

Guillermo abrió su boca dando paso a la lengua de Samuel que necesitaba urgentemente saborearlo como si de un dulce se tratara, entreabrieron sus ojos y solo sus lenguas jugueteaban con parsimonia; un pequeño hilillo de saliva adornaba la comisura de los labios de Guillermo. Sin embargo, Samuel quería mezclar aún más sus esencias en sus bocas en el beso más apasionado que habían experimentado, en el que mantenían su plena concentración, porque las embestidas solo eran un acompañamiento para el acto de consumación de amor de esta joven pareja, ya que en ese momento aquel beso lo significaba todo.