I CAN SEE YOU || Steve Harrington

Capitulo 21 ᯓ★

La señal de Erica finalmente llegó. Había tardado demasiado, eso era innegable, pero la seguridad y la paciencia siempre valían la pena. Más vale tarde que nunca, ¿cierto?

Robin: Hasta ahora, todo bien ──murmuró, acercándose a sus tres amigos.

Steve: Sí, aunque no hemos llegado a lo difícil.

Nancy: Muerde el anzuelo. Muerde el anzuelo, hijo de perra.

El grupo continuaba esperando señales de cualquiera de los otros miembros. En serio deseaban que todo saliera bien.

Erica: Muy bien, ya entró. Inicien la fase tres.

Olive: Todo listo. Hermano, pasemos a la fase tres.

Dustin: ¡Te copio! ¡Inicio de fase tres!

Instantes después, las violentas melodías de la guitarra de Eddie, tocando ‹‹Master of Puppets››, comenzaron a aturdir a los murciélagos que rodeaban la casa. Automáticamente, estos salieron disparados en dirección al origen de la música.

Olive no pudo evitar sonreír; después de todo, había sido ella quien recomendó esa canción a Eddie, sabiendo perfectamente que era su estilo.

Nancy: Okey, funciona. Vamos ──ordenó, poniéndose de pie.

Los otros tres no tardaron en seguirla. Al abrir la puerta de la casa, se encontraron con un espectáculo que los dejó perplejos: lianas y vides cubrían por completo cada rincón del lugar.

Steve: Ay, no... Esto no es bueno ──murmuró, tan asustado como el resto.

Sabían que cruzar por allí sería todo menos sencillo. Steve no perdió tiempo y comenzó a moverse rápidamente por los espacios libres del suelo, tratando de esquivar las enredaderas.

Steve: Carajo...

Olive: Mierda ──masculló, con los nervios a flor de piel.

Nancy: Tranquilas, nosotras podemos hacer esto -aseguró con firmeza, intentando calmar a Robin.

Sin esperar más, Olive y Robin comenzaron a seguir los pasos de Steve. Sabían que si dudaban demasiado, el miedo las paralizaría, y salir corriendo no era una opción.

Sin embargo, el verdadero desafío llegó al intentar subir las escaleras. La mala suerte de Olive y el escaso equilibrio de Robin complicaron aún más las cosas. En uno de los saltos, Steve estuvo a punto de caer sobre Olive, pero gracias a la rápida acción de Nancy y la misma Olive, lograron evitar una tragedia.

Finalmente, alcanzaron el segundo piso. Agradecieron haber llegado con vida y, una vez allí, se agruparon, preparando sus armas para enfrentarse al ático.

Cuando parecía que las cosas no podían empeorar, la tierra comenzó a temblar nuevamente, como lo había hecho la noche anterior. Aunque no era la primera vez, el temblor seguía tomándolos por sorpresa.

Olive se aferró al hombro de Steve para no perder el equilibrio, mientras él, con un brazo, la sostenía y, con el otro, trataba de proteger a Robin y Nancy.

Al cesar el temblor, se miraron entre ellos para asegurarse de que todos estuvieran bien. Fue entonces cuando notaron que algo estaba mal. Robin bajó la mirada hacia sus pies, donde una de las vides comenzaba a enrollarse alrededor de uno de ellos.

La vide tiró de Robin con fuerza, y ella, aterrorizada, levantó la mirada hacia sus amigos antes de ser arrastrada. Pegada contra la pared, otras lianas se enroscaron en sus brazos, piernas y cuello, inmovilizándola por completo.

Robin: ¡Steve! ¡Olive!

Olive reaccionó rápidamente, tomando el hacha que Robin había dejado caer. Se lanzó contra las vides, atacando la que sujetaba a su amiga. Nancy y Steve no tardaron en unirse al esfuerzo.