Capitulo 31

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Oí el sonido de mi despertador, estaba sonando muy fuerte y yo quería seguir durmiendo, aún con mis ojos cerrados, estire mi brazo para apagarlo pero fue allí cuando no lo alcance y caí al piso dándome un fuerte golpe en la cara.

-¡aush!

Me levante y fui al baño a verme en el espejo, mi rostro esta rojo, no tome importancia y me metí a la regadera. Salí después de unos 15 minutos envuelta en una toalla.

Me puse ropa deportiva ya que iba a salir a correr un rato.

Baje y allí estaba mi padre desayunando ¿solo?

-buenos días papá -le di un beso en la mejilla

-buenos días princesa -dijo

-¿y mamá?

-se a ido temprano al trabajo, tuve que prepararme el desayuno yo solo -dijo, yo solo asentí con la cabeza y tome una manzana de la frutera -¿y tú a dónde vas?

-a correr un poco -dije -así que ya me voy, pá te amo

-y yo a ti

Salí de casa y empecé a correr, me coloque los audífonos ya conectados a mi teléfono y puse una canción aleatoria, y al instante empezó a sonar "Sing - Ed sheeran".

Mientras corría sin saber por dónde, iba tarareando la canción una y otra vez.

Sing
Oh oh oh, oh oh oh
Louder
Oh oh oh, oh oh oh
Sing
Oh oh oh, oh oh oh

Sin importar que me escucharan o me miraran feo, seguía cantando.

Hasta que sentí tropezar con alguien y caer al piso de nalga.

¡Oh vaya, ¿será que hoy es mi día de mala suerte?!

-no sabes cuánto lo siento -dijo la persona ayudándome a levantar -¿chloé?

-max -dije sorprendida

-pero que gusto verte -dijo -no nos vemos desde...

-si desde que terminamos la primaria -dije

-sí, cuánto tiempo, ya eres toda una mujer -dijo max -¿qué te parece si un día de estos salimos a tomar un helado?

-me parece perfecto -le dije sonriente

-bueno así será -dijo -¿me das tu número?

-si claro, toma -le di mi teléfono para que apuntara su número y él me dio el suyo -listo

-bueno quedamos así, nos vemos pronto chloé -me dio un beso en la mejilla, muy cerca de la boca diría yo

Ok. Max fue mi primer novio, estudiábamos juntos en la primaria, terminamos porqué cada uno iría a secundarias diferentes y desde entonces no supimos nada el uno del otro.

Quién diría que me lo encontraría por aquí.

Seguí corriendo y corriendo hasta que me canse y decidí volver a casa.

De camino a casa, recibí una llamada de niall y contesté.

-Hola -dije

-Hola linda -dijo niall -¿en dónde estás? Estoy afuera de tu casa

-ya voy para allá -dije -estaba corriendo

-está bien, aquí te espero -dijo

Colgué el teléfono y camine más rápido hasta mi casa, hasta que al fin llegue. Y lo vi allí recostado en su auto, me acerque a él.

Corazón de hielo [Niall horan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora