IN THE SHADOWS

Capítulo 1: Ojos rojos

Mitsuki

Al acabar la Guerra de los humanos contra los vampiros, las tres grandes naciones fueron conformadas, El Dragón, El Tigre y La Serpiente. Si bien estas ya existían, después de esta gran confrontación se decidió que tres familias, las más poderosas entre los vampiros tomarían el liderazgo de ellas. Ese fue parte del acuerdo. Sin embargo, como una garantía de que los humanos estarían a salvo se consolidó la Orden de los cazadores.

La nación del Dragón es liderada por la familia Real Zen, quienes en acuerdo con el líder de los cazadores crearon una alianza donde establecieron reglas para ambas especies.

· Ningún vampiro atacará a los humanos

· Ningún cazador atacará a los vampiros que cumplan las reglas.

-El principio de la nueva era –Suspiro pesadamente dejando el libro que leía en la mesa frente a la que me encuentro sentada.

Aunque no viví la Guerra imagino lo doloso que debió ser, muchas familias se separaron y muchas más murieron. Que cruel. Sería malagradecida si me quejará de mi vida. Quizás no tenga amigos y para mi familia soy una molestia, pero vivo en una casa bonita y no me falta nada material, además mientras tenga libros puedo vivir sin aburrirme o sentirme sola.

Unos toques en la puerta hacen que mi atención se dirija a esta.

-Mitsuki ¿estás aquí? –mi tío hace acto de presencia asomando su cabeza por la puerta.

- Sí ¿Me necesitabas para algo tío? –es raro ya que creí estaba en una misión como cazador.

-¿Tío? te he dicho que me llames Andre, A.N.D.R.E, ¿te parece difícil? –se hace el ofendido, como si su cara no lo delatara.

-Está bien T.I.O A.N.D.R.E –sonrió con inocencia, que puedo decir, me encanta jugar con él.

-Muy lista niña, pero ¿Qué estás haciendo? –hace un pequeño puchero antes de entrar de lleno a la habitación y acercarse hasta la mesa.

-Cómo puedes ver estoy leyendo El Principio de la Nueva Era –le enseño el libro que hace unos momentos leía.

-¿leer? Por favor, deberías salir y divertirte con tus amigos, no puedes estar aquí encerrada como prisionera leyendo todo el día, todos los días. –niega repetidamente con su cabeza.

-¿sabes que no tengo amigos verdad? –sentencio con gracia.

-y no entiendo el por qué. Eres agradable y linda, en serio no entiendo a los jóvenes. –sus brazos se cruzan sobre su pecho. Clara señal de molestia.

-Vamos tío Andre, ni siquiera mis hermanos o mis padres comparten tu opinión. –señalo lo evidente.

-Perdóname Mitsuki, tener que soportar todo esto debe ser difícil. – su expresión cambia, su rostro paso de molesto a uno triste. A veces he notado estos cambios en su mirada cuando la posa en mí. Primero se ve triste por algún motivo y luego cuando nuestras miradas se encuentran sonríe y me dice que todo está bien.

-Tú no tienes la culpa de que mis padres sean así. – sonrío, si bien mis padres no me tienen mucho aprecio, él se ha encargado de darme cariño.

-Bien, pues el día de hoy, vamos a salir –comenta emocionado –ven conmigo –ni bien termina la frase, toma mi mano y bajo las escaleras casi corriendo hasta que nos topamos con toda la familia reunida.