Mi "hermana"

Capítulo 4

Me desperté cansado, miré la hora, las 10:30a.m.. Me levanté de la cama con pereza y me dirigí al aseo, aún llevaba la ropa del día anterior puesta y ni me había dado cuenta.
Me miré al espejo, tenía unas grandes ojeras bajo los ojos (las suelo tener siempre después de llorar) así que me lavé la cara para intentar que se notaran menos. Bajé a la planta de abajo de la casa, donde estaba la cocina (si, mi casa es de dos plantas); vi a mi hermana preparando el almuerzo.

Yo(mientras bostezaba): Buenos días.
____: Buenos días, ¿estás mejor?
Yo: No mucho, ¿papá y mamá se han ido ya a trabajar?
____: Si, ayer les dije que la cena nos sentó mal y por eso hoy no hemos ido al instituto.
Yo: Ah... ¿Y no me has despertado?
____: Lo iba ha hacer en cuanto terminara de preparar el desayuno, he pensado que ayer no pudiste dormir muy bien y que ahora tendrías sueño.

El pan de la tostadora saltó, ____ lo puso sus panes en un plato y los mios en otra, luego desayunamos juntos.

Acabamos de desayunar.

____: Bueno, no hemos ido al instituto para investigar sobre tu hermano, ¿empezamos?

Estaba algo nervioso por lo que íbamos ha hacer, pero a pesar de eso contesté que si a la pregunta de mi hermana.

____ subió a su habitación y cogió el portatil que estaba siempre en su mesa de estudio. Bajó y se sentó en el sofá con el ordenador, yo me puse a su lado.

____: Vale, ya está encendido, ¿qué busco en Google?
Yo: Pon "Daniel Oviedo Morilla".
____: Antes de que teclee, ¿estás seguro?
Yo: Si.

____ tecleó el nombre de mi gemelo en internet y entró en su Twitter, que fué lo primero que le salió.
Leí su biografía: "Mairena, Sevilla. LVK equipo David. 14 años".
Ya sabía de donde era.

Yo: Tenemos que ir a Mairena.
____: ¿A Mairena?
Yo: Si, a Mairena, tengo que saber más cosas sobre mi familia.
____: ¿Y por que no hablas con papá y mamá?
Yo: Por mucho que hable con ellos nunca me podrán decir todo lo que necesito saber.

Seguimos buscando más información, cada cosa que leía sobre mi gemelo o sobre mi familia biológica me partía más el corazón y hacia que me entraran más y más ganas de llorar pero comprendía que esto era la realidad y que aunque a veces uno quiera evitarla no puede...

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Era ya casi medio día, nos habíamos pasado toda la mañana con el ordenador; descubrí que mis padres se llamaban Eva y Juan Carlos y que también tenía un hermano mayor llamado Juan Carlos, como mi padre, pero estaba estudiando fura.

____: Bueno, ya es casi medio día, papá y mamá llegarán enseguida.
Yo: Hay que guardar el ordenador.
____: Vale, voy a guardarlo y tu enciende la tele, cuando vengan los papás les decimos que ya nos encontramos mejor.
Yo: Vale.

Mi hermana fue a guardar el ordenador, yo me quedé en el sofá, con la tele encendida, pensando en todo lo que había descubierto esa mañana y como decirle a mis padres que quería ir Mairena a conocer s mi familia biológica.
En ese momento me sentia raro, quería ir a Mairena pero tenía miedo a conocer a esas personas que me habían abandonado, a ese hermano gemelo que seguramente no sabía nada de mi,... Quería hacerles tantas preguntas... Pero estaba también enfadado en parte con mis padres no adoptivos por abandonarme cuando era pequeño; también estaba asustado, ¿qué pensarian de mi? Tenía tantos sentimientos raros...

Mi hermana bajó de su habitación y se sentó a mi lado.

____: Jesús, ¿estás bien?

A veces se preocupaba demasiado por mi, pero a pesar de eso la quería mucho.

Yo: Si... No te preocupes hermanita.

Enseguida tocaron al timbre, eran nuestros padres, fuí a abrir.

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Estábamos sentados en la mesa comidndo, les habíamos dicho a nuestros padres que nos encontrábamos mejor y que el Lunes ya iríamos al instituto (era Viernes).
Aprobeché que estaba toda la familia para sacar el tema de Mairena.

Yo: Papá, Mamá, tengo que deciros una cosa.
Mi madre: ¿Qué pasa hijo?

Me costaba un poco decirle esto a mis padres (porque como ya he dicho otras veces ellos sienpre serán mis verdaderos padres, los que me han criado toda la vida y los que me han dado todo), no sabía como se lo irían a tomar.

Yo: Pues... Ayer encendimos la tele por la noche y apareció un chico... Igual que yo.

Creo que me costaba más a mi contarlo que a ellos comprenderlo.

Mis padres se miraron entre ellos sorpendidos, luego me miraron a mi.

Mi madre: Jesús...

Sabía lo que iba ha decirme.

Yo: Si, cuéntame todo lo que sepas de mi família biológica.