Capítilo 23

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NARRA ____

¿Qué estaba pasando?
¿Primero Dani y ahora Jesús?

Cuando Jesús empezó a besarme el labio e de admitir que me gustó, tanto como los besos de Dani pero... Era Jesús quien me los daba, ese era el problema.
No es que yo no quisiera a Jesús, es más, le quería, y mucho, pero no de esa forma.

Me separé de el con una pequeña lágrima en mi mejilla, ¿qué se supone que estaba pasando? ¿Qué debía hacer?

Yo: ¿Jesús?

No dijo nada, sino que clavó la mirada en mi, haciendo que no pudiera dejar de observar esos ojos color café de lo cuales estaba enamora y los que eran tan absolutamente iguales a los de Dani.

Yo: No me mires.

Me costó decir esa frase.

Me sentía rara en aquella situación y lo único que faltaba para hacerme sentir peor era esa mirada.
Me di la vuelta para irme de la cocina y alejarme de él, aunque una pequeña parte de mi me decía que no lo hiciera.

En cuanto me giré vi a Dani plantado delante de la puerta mirando a Jesús y, creedme, si las miradas matasen Jesús ya no seguiría ahí.

Yo: ¿Qué está pasando?

Miré a ambos lados, Jesús y Dani se miraran comí si quisieran acabar el uno con el otro, pero ninguno de los dos respondía a mi pregunta.

Yo: ¿¡Qué está pasando aquí!?

Volví a mirarles, sus miradas de odio del uno con el otro aumentaban por momentos.
De repente me di cuenta de que Dani tenía un moratón en la cara.

Yo: Jesús... ¿No habrás sido tu?...

El silencio de los dos me dijo la respuesta, claramente había sido Jesús pero... ¿Por qué?

Dirigí mi vista hacía Jesús, me había criado con el y en todos estos años nunca lo había visto hacer algo así, ni siquiera cabía en mi cabeza la posibilidad de que el hiciera semejante cosa.

Tenía que irme de ahí, no podía quedarme, esto era algo que tenían que resolver ellos, no yo.

Me sequé las lágrimas en la sudadera de Dani y fui hacía la puerta para salir de esa casa. Solo quería acostarme un rato y dejar que todo esto terminara.

Me dispuse a abrir la puerta cuando alguien me cogió del brazo y me impidió girar el pomo de esa puerta...

Mi "hermana"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora