El Pianista

Una Cena Aburrida y Un Nuevo Amante

Ya es domingo en la mañana, hoy es la cena... fiesta... reunión... lo que sea que mis padres tienen planeado para esta noche. Aun no entiendo por qué debo ir, pero siempre estoy obligado a asistir a estas cosas, presentarme y que mi padre pueda presumir lo "maravilloso" que soy en todo lo que hago. Preferiría quedarme encerrado en mi habitación viendo alguna serie o leyendo. Mientras me visto, pienso en que me gustaría usar unos simples jeans y una camiseta, pero mi madre no me dejaría salir de mi habitación vestido de esa forma. Comienzo a peinar mis rizos y no puedo evitar frustrarme, son incontrolables! Decido dejar mi cabello como esta, no puedo hacer más nada. Bajo a la cocina para almorzar y veo en la sala a mi madre gritando órdenes a todo el que se atreviese en su camino.

-Cuidado con esa vajilla, es muy costosa!- le grita a una chica que lleva varios platos en las manos- tu, el de las flores, espero que el jardín se vea perfecto y con suficiente iluminación! También quiero que pongas flores por la casa

-Buenas tardes, Anne- la saludo, pero está muy ocupada como para prestarme atención

-Alguien ha visto al encargado de los manteles de las mesas!?

Suspiro y sigo hacia la cocina, donde Grace y otras mujeres corren de un lado para otro moviendo platos, cortando vegetales, condimentando comida, etc. Le sonrió a nuestra ama de llaves y ella me devuelve el gesto, aunque se ve que está agotada. Después de unos minutos deja un plato frente a mí, mi almuerzo. Cuando termino de comer, vuelvo a mi habitación y me distraigo leyendo, hasta que es la hora de prepararme para la cena. Cuando faltan diez minutos para que la gente comience a llegar, mi madre entra en mi habitación sin tocar. Ya estaba perfectamente arreglada. Me mira de arriba abajo con el ceño fruncido y suelta un gruñido de frustración.

-No puedes hacer nada mejor con tu cabello?- me reprende

-Ya lo intente...

-Tu corbata esta torcida, arréglala- sigue mirando mi atuendo en busca de más defectos- tienes que lustrar mejor esos zapatos. Eso que veo es una arruga en tu camisa!?- parece horrorizada

-Creo...- digo mirado mi camisa en busca de alguna arruga

-Pues quítatela y plánchala de nuevo! Acaso no puedes estar presentable por una vez en tu vida?

-Lo siento...

-Te quiero abajo en cinco minutos, no más ni menos, entendido?

-Si, Anne

Cuando termino de arreglar todos los defectos que mi madre vio en mi vestimenta, bajo al salón y veo que ya han llegado un par de invitados. Me acerco y los saludo cortésmente, mientras ellos hablan con mi padre sobre negocios.

A medida que avanza la noche, llegan muchos más invitados y yo estoy obligado a saludar a cada uno de ellos y ser cortes. Cuando por fin aparece Liam con su familia, me siento aliviado. Ya no tendría que participar en aburridas conversaciones sobre negocios.

-Liam, al fin llegas, eres mi salvación- digo abrazando a mi amigo

-Sé que me amas, ricitos pero contrólate no creo que a tu madre le guste que arrugue tu traje- me rio

-Tienes razón

-Ven, busquemos algo de tomar... tal vez podamos conseguir algo de alcohol

Caminamos lejos de nuestros padres. Mi mejor amigo hace que mi humor cambie por completo, pronto estamos haciendo bromas sobre las personas que nos rodean y robando bocadillos. En una oportunidad, me reta a una carrera hasta el bar que habían instalado en la otra habitación. Íbamos esquivando personas y riendo, cuando me tropecé con alguien más alto que yo, haciendo que casi me cayera. Subí mi mirada y vi esos ojos azules que me gustaron desde el primer día, junto con una hermosa sonrisa. Louis había detenido mi caída.