Los Trillizos Bieber-Justin Bieber y Tu (EDITANDO)(ADAPTADA)

Capitulo 32

  POV justin

Suspiré y la abracé más fuerte mientras ella lloraba. No me gustaba que
llorase, ella tenía que sonreír, siempre, pero no le diría que no lo hiciera,
porque a veces, llorar es bueno. Y esta situación me rompía, y me sentía un
idiota por no haberla abrazado otras veces. Posiblemente, esto era lo único
que la chica quería.
Minutos más tarde ella se separó de mí y me miró a los ojos. Sus ojos rojos,
provocaban que un escalofrío recorriera todo mi cuerpo. Estaba preciosa, aun
llorosa. Era preciosa.

- Gracias - susurró separándose de mí.
- No las des - susurré también. ¿Por qué susurrábamos en vez de hablar? Ni
idea, pero me gustaba hacerlo.
- ¿Por qué susurramos? - preguntó ella adivinando lo que yo pensaba.
- No lo sé - admití sonriendo como un bobo y ella hizo lo mismo.
Besé su frente sin saber porque y luego, con mi mano en su cabello, puse su
cabeza en mi hombro de nuevo. Y así nos quedamos por un rato. Silencio, mis
brazos rodeándola, ella soltando alguna que otra lágrima. Eso era todo, pero
era perfecto. Aunque tenía curiosidad de saber, porque nadie la había
abrazado nunca, porque ella lloraba. Y yo quería saber que era lo que la hacía
llorar. Pero no quería preguntarle, por miedo a que llorara más de lo que le
hacía

La separé de mí y le miré a los ojos

- No llores más - dije yo y ella asintió - Vamos a hacer algo para que te olvides.
- dije yo con la mejor intención del mundo. Pero ella malinterpretó.
- justin- me advirtió poniéndose sería.
- No me refiero a nada de lo que estás pensando. - dije yo sabiendo
claramente que ella pensaba que yo quería acostarme con ella. Sí, a ver,
quería. Pero no iba a hacer eso ahora, sabiendo que le molestaba.
- Ah - dijo ella.

Piensa algo justin, me decía a mí mismo. Pero no se me ocurría nada decente.
Todos mis pensamientos eran sucios. La cabeza, la cabeza. Me repetía a mí
mismo. Piensa con la cabeza.

- ¿Quieres ir a... a... - no se me ocurría nada
- ¿Pasear? - sugirió.
- Sí eso - dije yo. Y ella se levantó.
- Vamos - dijo sonriendo aún son los ojos llorosos.

POV dereck

Me fui de allí y bajé a la cocina a por agua. Tanto chocolate acababa
empalagándome. Aunque no por eso iba a dejar de comer chocolate, asique
le di otro mordisco al Kit Kat. Estaba buenísimo. Dejé las chocolatinas en la
mesa y agarré un vaso de agua. Lo llené. Y me quede bebiendo pensativo
mirando la pared.
No entendía, bueno, no me entendía. ¿Cómo podía estar tan confuso? Ni
siquiera sabía porque me había ido de allí, porque, no quería dejarla sola con
justin. Pero me sentía incómodo después de besarla y no haber podido
acabar de decir lo que quería decirle.
Sabía que justin estaba detrás de ella, y sabía que de una manera seria.
Nunca había sido así con ninguna. Nunca. Y, eso me molestaba aún más. No
porque se hubiera enamorado de la misma que yo, sino, porque me dificultaba
las cosas. No sabía qué hacer, mi mente estaba hecha un lio, uno de los
grandes. Que si _____, que si Paola, y ahora _____ y luego Paola. ¿Tan difícil
era elegir una? ¿Aclarar cuál me gusta más? Pues sí, muy difícil.

- Buenas tardes - dijo jasmine entrando a la cocina. ¿Cuándo había llegado?
- Buenas tardes - le conteste.
- ¿Y esa cara? - dijo ella mirándome.
- La mía - conteste y ella negó con la cabeza.
- Te ves pensativo.
- Lo estoy - afirmé yo y mi móvil sonó. Lo saqué de mi bolsillo y vi que tenía un
mensaje. Será chaz. Pensé. Lo abrí, y para mi sorpresa no era Louis. "Ven a
mi casa, ahora. Paola" Sonreí, tan directa ella, como siempre.
- ¿De quién es? - preguntó jasmine con los ojos iluminados acercándose a mi
emocionada. Negué con la cabeza.
- Nadie.
- Imposible, uno no sonríe como un tonto si no es nadie. ¿Quién es? - dijo
curiosa y emocionada al mismo tiempo.
- ¡Nadie! - ella alzó las cejas.
- Vale, pues déjame ver lo que "nadie te ha mandado" - dijo ella.
- No - dije yo pero ya la tenía encima intentando sacarme el móvil.
- ¡Ay dereck que quiero saberlo! - dijo ilusionada. ¿De verdad tanta emoción le hacía saber de quién era? - "Ven a mi casa ahora" - le yo y la miré
preguntándome cuando narices había cogido mi móvil si yo lo tenían en la
mano.
- ¿Cómo lo has cogido? - dije yo .
- ¡Secreto! - dijo ella - Pero dime ¿Quién es Paola?
- Nadie
- Ay dereck dímelo - suplicó como una niña pequeña.
- ¡Que no! Tengo que irme - dije quitándole el móvil y ella sonrió cínicamente.
- Haz que Paola disfrute - dijo con el mismo tono que ponía justin a veces.
- ¡jasmine! - me quejé sabiendo que me estaba poniendo como un tomate.