Viernes por la tarde, acababa de volver de su descanso del almuerzo, lo único bueno de trabajar de 6:30 am a 10 pm era sus 3 horas libres de descanso. Aunque solo fueran 3 horas, para él valía oro. Ya esperaba con ansias el sábado, no era por alguna ocasión especial o algo por el estilo, si no porque era su único día libre junto con el domingo.
Su vida no tenía nada de interesante: Levantarse, comer, ir a trabajar, volver, comer y dormir. Así todas las semanas.
Hacía más de tres semanas que no veía a su mejor amigo Goten, ni al resto de los Guerreros Z. Hacía más de tres años que no tenía sexo y el dirigir esa empresa era como una regla que le ponen los padres a sus hijos "No comas chocolates antes de la cena" "Haz tu tarea" "Acuéstate temprano" sólo que con ordenes de adolescentes, "Nada de sexo, nada de fiestas, nada de chicas, ¡NADA, NADA, NADA!"
Desde que su abuelo materno murió, Bulma se tendría que ocupar del laboratorio, y para jefe, Vegeta no era una opción. Él, al tener veinte años y ser maduro para tal edad, su madre no tuvo otra alternativa que dejarlo a él, un adolescente de veinte años con el mando de la gran empresa que era la Corporación Capsula.
Al llegar a su casa todos dormían, así que revisó el horno, y como todas las noches, su mamá había dejado las sobras ahí. Comió el pastel de papa en absoluto silencio, pensando lo aburrida que era su vida, y como antes, la pasaba tan bien.
Al terminar su comida, lavó las cosas utilizadas, y con la intención de darse una relajante ducha a las doce de la noche, fue a su cuarto y agarró la ropa necesaria. Al terminar, se vistió con su habitual pijama y se acostó a dormir. Sin embargo, por más cansado y aburrido que sea dirigir una empresa dieciséis horas del día, no pudo conciliar el sueño. Pero al pasar las horas sus parpados, pesaban como rocas. Así que, al tiempo de quedarse dormido, la canción Paradise de ColdPlay comenzó a reproducirse desde su celular.
Llamada Entrante.
No sabía quien podía llamarlo a altas horas de la noche, pero sin duda, fuera quien fuera, lo maldeciría de por vida.
—¡¿Qué?!.—exclamó molesto.
—Hey, ¿estás de mal humor?.—respondió esa calmada voz del otro lado de la línea, y sin duda, la reconoció al instante.
—¿Go-Goten?.—tartamudeó.
—Él mismo.—casi podía ver la sonrisa en el rostro de su mejor amigo.
—¿Qué ocurre?—preguntó bostezando.—¿Para qué me llamas a las...—hizo una pausa para ver el reloj en su mesa de luz, y abrió los ojos como platos al percatarse de la hora.—¡Cinco de la mañana!?
—Tenía ganas de hacer algo juntos, hace mucho no lo hacemos. ¿Qué te parece?.—rió al momento de darse cuenta de que el "hace mucho no lo hacemos" sonaba... ¿cómo suavizarlo?... Mm, gay, si me entienden.
—Te veo en el bar Season en quince minutos.—respondió él, y acto seguido cortó la llamada. No tenía muchas ganas de ir, pero ya extrañaba salir a un bar con su mejor amigo de toda la vida.
Se levantó, se vistió con unos jeans holgados negros, y una remera negra, acompañado de sus Vans negras, las cuales hace semanas no usaba, gracias a que lo obligaban a usar unos incómodos zapatos para su oficio.
Salió por la ventana de su habitación y rápidamente ocultó su ki, para que no supieran donde estaba. Si salía de la casa sin permiso, de seguro lo matarían.
Voló hacia el bar, y entrando encontró a Goten, con una botella de cerveza en una mano, y con una mujer en la otra.
Nunca cambiará, pensó él.
Elevó su ki para que Goten dejara a esa mujer a un lado y se percatase de que ya había llegado. Metió sus manos en los bolsillos de sus pantalones y comenzó a silbar. Elevó su ki, tanto que en cualquier momento se convertiría en super saiyajin. Goten, por fin se percató de ello y soltó a la mujer castaña, quien con cara triste, volvió a bailar a la pista de baile. Él se encaminó a hacia su amigo.
—No cambias más, Goten.—rió.—Todo un rompe corazones.
—Ella me acosaba.
—rió.—Claro.—ironizó rodando los ojos con humor.
—Es enserio.—dijo cruzándose de brazos, haciéndose el ofendido.
—Ya, dime, para que querías verme.
Goten se puso más serio de lo normal, la sonrisa en su cara se desdibujó y dejó la cerveza sobre la mesa, con sus dos manos agarró a Trunks de los hombros y habló, por fin: —Te tengo que hablar de algo muy importante.
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¡Hola! Espero que les halla gustado.
Ah y por si no entienden, lo que "malpensó" Trunks durante la llamada, es que Goten dijo que "hace mucho no lo hacían" y automáticamente pensó en sexo. ¿Entienden?
Estos hombres de hoy.... okno._.
En multimedia les dejo una foto de Jade, la hija de Tarbles. Así es como yo me la imagino, Es Malese Jow en Big time Rush, por si las dudas. Ah, y también la canción Paradise de ColdPlay, el ringtone de Trunks xD
Comenten, besos :)
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Vida aburrida. -Trunks y Marron-
FanfictionÉl es el jefe de la Corporación Capsula. Ella es una estudiante universitaria. Él es frío. Ella es tímida. Pero dicen que los opuestos se atraen, ¿cierto? Prohibido plagio, traducción o adaptación de la historia sin mi permiso.