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Disclaimer: MARVEL & Disney no me pertenecen. La historia sí.

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Había terminado el entrenamiento matutino y se dirigió a darse una pequeña ducha para luego, ir en busca de los regalos con Romanoff; se arregló rápidamente, no quería hacerla esperar más y bajó al hall.

Ella lo esperaba. Lista como siempre, Natasha Romanoff vestía casual, con sus vaqueros y una chaqueta color marrón.

Sentía algo de nerviosismo ¿Por qué? No era una cita ni nada por el estilo. Pero se le hacía fascinante poder ir de compras con Rogers. Era algo totalmente nuevo.

—Hola arañita, veo que te has levantado temprano el día de hoy... ¿A dónde vas? —preguntó Tony interesado.

—A comprar regalos de navidad y veo que tú ya los tienes todos... —respondió Natasha a Tony, quien venía con muchas compras.

—Bueno decidí salir temprano. No me gusta la aglomeración de gente.

—Claro... —respondió sin interés, mientras miraba si Steve venía.

—¿Esperas a alguien más?

—Si Stark, espero a alguien más... ¿Tienes alguna otra pregunta? —Tony la estaba sacando de quicio.

—Hey tranquila... sólo preguntaba... Mujeres —murmuró por lo bajo. Natasha lo escuchó, pero no quiso responderle nada. Sólo rodó los ojos y siguió mirando si Steve venía. —¡Hey tú! —Tony llamó a uno de sus 'botones' que estaba en el Hall— Ayúdame con esto y llévalos a mi oficina... no, este regalo no, es para Pepper, lo llevaré yo mismo.

Natasha arqueaba sus cejas mirando a Tony como trataba al pobre muchacho. Cuando de repente a lo lejos lo ve acercarse de a poco. Era él. Sonrió pasa si misma, se veía guapísimo. Aunque vestía normal, ella lo encontraba perfecto para sus adentros.

—Disculpa la demora, Natasha... —dijo con voz algo agitada—. No encontraba mi chaqueta.

—No te preocupes, llegué hace diez minutos. Stark me entretuvo... —Steve vestía unos pantalones marrones, una camisa y su inseparable chaqueta de cuero. Parece que la asesoría de ella estaba dando resultados.

—Supongo que te preguntó sobre los regalos y esas cosas no... —empezaron a caminar hacia la salida de la torre.

—Lo conoces bien —respondió ella—. En fin...tenemos un largo día y yo ya tengo el listado de gente para comprar regalos. —sacó un papel de su bolsillo.

—Bueno, en camino entonces.

—Tú lo has dicho... —Natasha empezó a caminar, pero vio que su compañero no lo seguía. Lo observó. Se veía pensativo. Se devolvió hacia él— ¿Pasa algo?

—Pensaba... hacer algo antes de ir de compras contigo.

—¿A qué te refieres...?

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Natasha rodeaba la cintura de Steve con sus brazos. Si, el muchacho la convenció para dar un paseo en moto antes de ir de compras.

—¡Steve, vas demasiado rápido! —gritó Natasha al capitán, quien iba disfrutando del pequeño paseo.

—Vamos Nat, voy a la velocidad que debo conducir en ciudad ¡Estás exagerando!

—¡No exagero!, no es divertido —Steve notó que Natasha si estaba asustada, así que se detuvo en el parque más cercano— Lo siento, Rogers.

Navidad DiferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora