La noche anterior no había logrado conciliar el sueño, aun tenia la voz de Mark dando vueltas en mi cabeza, "y tu que sabes si no me interesa", ¿Por que lo había dicho ? una parte de mi creía que estaba exagerando pero, ¿Y si de verdad le interesaba a Mark? -No, no y no- repetía una y otra vez en mi mente, ese día en clase me lo pase con la cabeza a gachas, quería evitar todo contacto visual posible con él.
Panda Boy ni siquiera me saludo al llegar y las clases transcurrieron con normalidad, demasiada normalidad. Al tocar el timbre de salida, Henry se marcho dejándome a solas con Aron, con las palabras de Mark, había olvidado completamente la preocupación y el enojo que él tenía la noche anterior.
-Aron- le dije en tono de lamento- perdóname por lo de anoche, no era mi intención preocuparte.
- Lo se...y no hay motivo por el cual pedirme perdón, ese ese tipo el que debería disculparse- dijo subiendo de tono y señalando a Mark.
-Tsk....perdona? Por que motivo debería yo pedirte perdón?- contesto Mark levantándose de su banco.
-No creo que necesites que te lo recuerde.
-No la verdad que no, porque no hay nada que recordar, Amber debemos seguir con la tarea, seria bueno que te apuraras un poco a recoger tu cosas- me hablo ignorando totalmente la presencia de Aron...lo que a él no le gustó para nada.
Henry apareció con la salvación para aquella poderosa tensión que había en el salón, tomo a Aron del brazo y se lo llevo, por un momento me sentí aliviada de que se marchara....luego recordé que ahora Mark y yo estábamos solo en la clase y mis nervios volvieron.
Mis manos temblaban y aunque intentaba hacer contacto visual mis cuerpo no respondía, cuando por fin lo logre..lo vi...la expresión en su rostro mostraba tristeza...preocupación, no era le mismo Panda Boy de la noche anterior. Luego de analizar en mi mente las posibles formas de huir y su resultado, me di cuenta de que era imposible, de cualquier manera la curiosidad me haría volver a el y preguntarle que pasaba, por lo tanto decidí hacerlo de una vez por todas.
-Esta todo bien?- le pregunte con la cabeza a gachas- no te conozco lo suficiente, pero parece que algo te preocupa.
Mark, sin previo aviso comenzó a caminar hacia mi y para cuando pude reaccionar me estaba abrasando, con su cabeza recostada a mi hombro y sin decir una palabra. Estaba impactada, que le había pasado aquel niño de mama y papa seguro de si mismo que había conocido? Donde habían quedado su palabras altanera de la noche anterior, y sus bromas sobre mi persona?. Quería preguntarle todas esas cosas, pero no pude, simplemente me limite a colocar mi mano en su espalda y darle un par de palmaditas, como esas que dan los padres diciendo "todo va a estar bien" en esos días en lo que todo parece salir mal.
Luego de ese incomodo momento, Mark por fin decidió hablar y al mirarlo note las bolsas debajo de sus ojos...no había dormido en la noche, y probablemente eso y su tristeza era por la misma razón.
- Gracias-me dijo con una sonrisa algo apagada.
- Puedo saber el por...
- Te pareces a mi madre, cuando te abrase, me recordaste a ella, los mismos movimientos, los mismos latidos, esa calidez..
- Es lo que mi papa me hace cuando tengo un mal día o estoy triste.
-Es lo que ella solía hacer cuando yo estaba preocupado.
- Ya no lo hace mas?- le pregunte, guiada inconscientemente por aquella repentina conversación profunda.
- Ella falleció, cuando era pequeño, no la recuerdo mucho, pero si cierro mis ojos la veo, y solía sentir su calor al cerrar los ojos e imaginarla, pero últimamente creo que cada vez está más y más lejos de mi.
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It is You
Roman pour AdolescentsAmber es la menor de 3 hermanos, única chica. Vive en Georgetown un pequeño pueblo ubicado en el limite de Washignton D.C y Maryland. Tiene una gran pasión por la música de los 90, ama dibujar, leer, tiene el gran sueño cliché de viajar por el mund...