Eres mía (BTS Suga)

XXXVIII - De vuelta a casa

~NARRA MI HI~

Ya han pasado unos cuantos minutos pero aún sigo atónita. Ni siquiera sé porque no puedo moverme.

¿Acaso estoy esperando que Yoon Gi vuelva? ¿Debería seguirle? ¿Es mi culpa? ¿Debería pedirle perdón?

Tengo tantas preguntas pero no tienen respuestas. Solo volví a mis sentidos al notar algo duro en mi mano. Lentamente la abrí y vi un par de anillos, uno de chico y uno de chica. Casi se me cae la mandíbula por lo que vi.

Sí, aunque estoy aturdida no soy tonta. Los anillos significan algo. Significa que tu amado quiere casarse contigo.

Me imaginé a Yoon Gi proponiendo, por eso lloré.

Normalmente una chica llora de la felicidad, pero en mi caso no es así. Lloro porque no se llevó a cabo por mi acto irreflexivo. 

Agité la cabeza y pensé que esto sólo es una broma. Sí, esto es sólo una broma. No hay manera de que él me pidiera la mano para ser su esposa.

Me arrodillé para abrir las cajas que dejó caer delante de mí. Comprobaré que esto es solo una broma. Aunque estaba temblando me armé de valor. Abrí la primera caja y dentro había un traje de hombre. Luego abrí la otra y una sensación escalofriante recorrió mi espina dorsal.

Es un vestido blanco. Es tan blanco y elegante. 

Si fuera para mi, estaría muy contenta de recibirlo. Pero como sigo creyendo que esto solo es una broma, también recogí el sobre que quedaba por abrir. Respiraba pesadamente mientras lo abría. Las manos me temblaban y no podía abrirlo bien. No podía aguantar más y lo rompí. Saqué lo que contenía dentro y... mierda, son actas de matrimonio. 

Son actas de matrimonio, estúpida. Así que no es una broma. Tenía la intención de casarse conmigo y sin embargo, le destruí.

Empecé a sollozar, cuando de repente alguien entró en la habitación. Alcé la mirada y vi a mi madre.

—¡Mamá! 

Me levanté y corrí hacia ella. Le abracé y lloré en sus brazos.

—Mamá —lloré y sentí su palma en mi cabeza. Ella peinaba mi pelo con sus dedos.

Me dio un beso en la coronilla y susurró que lo dejara salir.

Lloré y lloré hasta cansarme. 

Después decidimos volver a casa. Estaba en un coche con mi madre y el tío Hyun Su. 

Sinceramente, quería preguntar donde estaba Yoon Gi, pero no tuve el valor para hacerlo y me lo guardé.