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-Despierta Mel.-dijo alguien mientras me sacudía de un lado al otro.

 Abrí mis ojos lentamente y me encontré con un elefante.

-¿Raimundo?-pregunte mientras restregaba mis ojos.

-El mismo.-dijo sonriendo.

-¿Qué haces vestido de elefante?-le pregunté.

-Es mi pijama-dijo haciendo puchero- ¿tienes algún problema?

-Eem... no, ninguno, solo que... ¿qué haces aquí?-pregunte sentándome en mi cama.

-Vine a avisarte que el desayuno ya esta servido pequeña doncella.-me respondió con una reverencia.

-Mmmh, ya bajo.-dije bostezando.

 Raimundo asintió y salio de mi habitación. Me levante peresosamente y baje hacia la cocina. En ella se encontraban los 5 chicos con pijamas de animales. Raimundo era el elefante, Liam era el tigre, Warren era el conejo (y tenía a Rodolfo en sus manos), Carter era el sapo y mi hermano era el unicornio.

-Que... que lindos pijamas.-dije divertida.

-El tuyo es aburrido cariño.-dijo Warren mirándome de pies a cabeza.

 Mi pijama era normal... consistía en una remera blanca con una taza de café en ella y un short rosita con muchas tazas de café.

-Mi pijama es normal.-dije encogiéndome de hombros.

-Bueno, hoy iremos a el centro comercial cariño, debemos comprar libros.-dijo Raimundo mordiendo una tostada.

 Mis ojos se abrieron y lo miraron.

-¿Leen libros?-pregunte sorprendida.

-Pues claro cariño, ese patch es muy sensualon.-dijo Carter sonriendo coquetamente.

-¿Son gays?-pregunte poniendo mis manos en la mesa.

-Claro que no.-dijeron todos a coro y mirándome con horror.

-Lo siento... solo pregunté.

-Nos gusta leer, te lleva a otro mundo y aparte a las chicas les gusta que los chicos lean.-dijo Liam sonriendo con suficiencia.

-Mmmh, si, nos encanta.-dije tomando mi licuado de frutilla.

-Bueno, ahora termina rápido, todavía nos debemos cambiar.-dijo mi hermano parándose de la mesa.



¿Por qué a mi?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora