Le dedico este capitulo a todos mis pandicornios que me han apoyado en todo. Y quiero resaltar a Areli-ventura por todo su apoyo y por comentar y votar siempre. Te amo pequeña.
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PoV Josh
Son las tres de la mañana y aun no la encuentro.
Ya he ido al hospital, a casa de nuestros amigos, a la heladería la cual estaba cerrada, al parque...
El parque...
Cuando eramos pequeños había un parque donde teniamos la casita de árbol, la cual hace poco fuimos para yo poder conquistarla con pequeñas cartas. (Cap. 5 / por si no recuerdan)
Debe estar allí.
Giré el auto y me dirigí allí.
Cuando ya estaba allí, subí al árbol y allí estaba, dormida en el suelo, con lágrimas secas en los ojos.
Durmió llorando.
Me acosté a su lado y la abracé para poder calentarla.
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PoV Jey
Desperté deseando que todo fuese una pesadilla, y una muy fea, pero no.
Estaba en la casa del árbol, con mi bebé y... ¿Josh?
Me senté de repente haciendo que se levantara.
- ¿Cómo me encontraste? - pregunté viendo como se iba sentando.
- ¿Porqué viniste aquí?
Comencé a sentir mis lágrimas caer y me recosté de la pared abrazando mis rodillas.
- No quería estar cerca. - baje la cabeza, escondiéndola en mis rodillas. - Ahora nada será igual. Tendremos que decirle a nuestros padres, en la escuela me molestarán por quedar...em...embarazada antes de tiempo...- comencé a llorar fuertemente. - No podré estudiar en la universidad porque tendré que cuidar de mi bebé...nuestro bebé.
- Mi amor, siempre hay algo positivo de cada cosa. Por ejemplo, no nos ocultaremos más, seremos una familia y ahora no solo seremos hermanos y novios, seremos hermanos, esposos y padres. ¿Qué dices? - levanté la cabeza y lo miré con la vista algo empañada, por las lágrimas.
- Josh, no lo quiero. - logré decir.
- ¿De qué hablas? - preguntó algo traumatizado.
- No quiero al bebé. Quiero una vida normal.
- Amor, eso lo resolveremos. Yo lo quiero y sé que tu igual. - cerré los ojos y suspiré - Te amo, Jeidy. Los amo a los dos. Y seremos felices los tres. Por favor, déjame ser el hombre más feliz de esta tierra y hagamos una familia feliz.
Le sonreí lo mejor que pude y le abracé con fuerzas.
- Te amo, Josh.
- Y tú no sabes lo tanto que los amo a los dos.
Nos quedamos unos minutos en la casa del árbol y luego salimos.
Caminamos un par de minutos por la calle, hasta que sonó el móvil de Josh.
- Es mamá. - me informó.
Eso me hizo volver al mundo real, saber que soy mamá y que mi novio en realidad es mi hermano.
- Hola, mamá. - dijo Josh.
- ¿Dónde estás, estás con tu hermana? Tienes mucho que decirme jovencito. - escuché que mi mamá gritó.
