Líneas Paralelas

No te mientas!

Se aproxima diciembre, todo es un caos en mi cabeza, continúa la ansiedad por saber que siente David por mi, y a la vez por andar con esta locura he olvidado mis trabajos finales, los profesores me preguntan ¿qué ha pasado contigo?, quisiera responderles que soy feliz, que me siento enamorada de una persona que ni siquiera me ha pedido que sea su novia.

Debo ser responsable, no puedo darme el lujo de que termine mal mi año escolar, debo ganarme mis vacaciones, me dedicaré en cuerpo y alma, no defraudaré a mi madre.

Llegó diciembre y he terminado con honores mi año escolar, Lo logré! grité en voz alta, pero nadie sabía que estaba detrás de mi premio, solo con pensar que David me pediría que fuera su novia era lo máximo, por fin había encontrado mi príncipe azul, había valido la pena esperar. :)

Estando en mi cuarto, alistando la ropa que llevaría en mi viaje, llega mi madre y me dice:

Madre: Emma, lo siento, esta vez no te podremos enviar de vacaciones a casa de tu prima Ruth en ciudad Cesia, la situación económica no ha sido buena, debemos esperar hasta febrero que las empresas empiecen a trabajar para poder reunir dinero, has sido muy buena estudiante, no olvidaré que te mereces eso y más. No te sientas triste, la pasaremos bien aquí en casa.

En ese momento salió de mi cuarto y no pude evitar llorar, solo podía pensar que David no esperaría tanto tiempo por mi, pero ni modo, no podía viajar, debía imaginarme que hacer en este tiempo que por cierto sería eterno y tratar que la ansiedad disminuyera un poco, ya que estaba por asfixiarme.

De repente, tirada en mi cama, mirando el techo, se me ocurrió una idea, sabía que mi tío viajaría a Ciudad Cesia y redacte rapidamente una carta a mi prima Ruth, decía asi:

Querida Ruth,

Lo siento mucho, mis padres no han podido enviarme de vacaciones a Ciudad Cesia, me moría por verte y compartir como la vez pasada. Sé que el tiempo pasará rápido. Te quiero pedir un favor, vigila a David, y asegúrate que ninguna muchacha ocupe mi lugar, me dolería mucho saber que no me ha esperado, pero ni se te ocurra decirle que yo te pedí esto. Me daría una pena horrible.

Te extraño mucho prima.

Con Cariño, Emma Leal

He cumplido 13 años,   de regalo he recibido mis merecidas vacaciones, ya soy toda una adolescente, aunque los cambios en mi cuerpo me aterran, hay hombres de avanzada edad que te miran como si fueras una mujer fácil, por eso pienso en seguir utilizando ropas anchas, así me siento mas segura.

Es viernes, he salido en el primer autobús y logré llegar  en la mañana a Ciudad Cesia, mi prima Ruth me recibió con un gran abrazo y me sorprendió que ya había apartado un lugar en su habitación para mi. Pasaban las horas y mi ansiedad crecía, no pude ni almorzar bien, me moría por ver a David, mi futuro novio David!, pero un segundo después me invadió la inseguridad, no sabía ni como dar mi primer beso, así que me tocó recurrir con la que ya tenía experiencia, mi bella prima Ruth.

y le dije:

Emma: Prima, no sé que hacer, nunca he besado a nadie :(

Ruth: Emma, Emma, dejate llevar por el momento, mejor vamos a alistarnos, porque le dije a David que nos veríamos en la esquina de la casa, tipo 7:00 p.m.

Emma: Esta bien Ruth, solo sé que mi corazón se quiere salir y eso que aún no he visto a David.

Pasaron las horas, me coloqué una falda vinotinto que me daba hasta las rodillas y una blusa negra, mis sandalias negras de tiras, me dejé el cabello suelto y me aplique ese perfume de uvas que me fascinaba. Todo estaba listo, nos ubicamos en la esquina pautada y allí estaba, David parecía un príncipe de ensueño, tenía un  jeans, unos zapatos negros, una camina manga larga azul oscuro y un perfume cautivador.

El estaba perfecto y yo pues desentonaba un poco, pero ya no me importaba, estaba allí conmigo como lo había esperado, de repente noto que mi prima Ruth ya no estaba, quedabamos solo David y yo, abrigados con la luz de la luna.

Yo bajé mi mirada, mientras que él me observaba, mi corazón se aceleró aun más, pensé que se me había salido cuando de repente siento que su mano voltea con suavidad mi cara y quedamos frente a frente, yo retenía mi respiración, me quedé estática y  lentamente  acerca su cara a la mía y sus labios se posaron en los míos, fue un beso lento pero que aun roba mis suspiros, pero no sabía que mas hacer y él al observarme , me susurró al oído, déjate llevar, pero creo que mi reacción fue lenta, mis labios no dejaban de temblar y lo único que se me ocurrió decirle fue:

Emma: David, espérame un momento, debo ir al baño

David: Esta bien, te espero aquí.

Salí con pasos acelerados, casi corriendo, y en el camino me encuentro a Ruth invadiéndome de preguntas, entré al baño y abrí la llave del lavamanos y me lavé la cara y Ruth continuaba insistiendo con sus preguntas.

Ruth: Emma ¿Qué pasó allí afuera? ¿te besó?

Emma: Oh Ruth, me besó y mis labios no han dejado de temblar

Ruth: Por Dios Emma! me has causado mucha risa, debes ser mas suelta, disfruta tu momento.

Volví a la esquina donde me esperaba David, pensé que me pediría que fuera su novia, pero solo permanecía en silencio, me volvió a dar un beso, esta vez fui mas suelta pero sabía que aún me faltaba mucho por aprender. Mi amor crecía cada día mas por David, debía esmerarme en ser la mejor novia para él, aunque debía ser consciente que solo sería de vacaciones.:(

Pasaron mis días de vacaciones, Ruth me invadía de preguntas cada vez que terminaba mis citas en la esquina con David y no podía negarle todos los detalles de nuestros encuentros, pero sentía dentro de mi que algo faltaba, no me sentía plenamente feliz, David no se comportaba como lo haría un novio orgulloso, no me sacaba a comer helado, ni me tomaba de su mano, no me escribía cartas, solo allí sentado, en silencio, escuchándome hablar, :( quizá le hacia falta tiempo, solo eramos dos adolescentes tratando de ser grandes, supongo.

Se acabaron mis vacaciones, el nudo en mi corazón es grande, Ruth no ha dejado de llorar y yo tampoco lo he podido evitar, pero David no ha aparecido para despedirme, quizá estaba ocupado o le dolía mi partida, debía ser comprensiva, era su novia, aunque esa era la duda, ya que en ningún momento me lo había pedido :(.

Volví a mi pueblo San Martín, he comenzado mis clases gracias a Dios, ya que al menos con esto me entretengo , porque veo pasar las horas, los días, las semanas incluso meses y David no ha hecho ni el intento de llamarme o  hacerme saber que me extraña, bueno en realidad me estoy volviendo paranoica, quizá no tenga dinero, debo sorprenderlo, ahorraré de mis meriendas y lo llamaré, sé que se alegrará mucho.

Pasó una semana y  logré reunir el dinero, no podía parar de saltar, solo con escucharlo me motivaría aún mas para continuar la espera, se que pronto nos volveríamos a reencontrar.

Emma: Hola David, ¿cómo has estado?

David: ¿Quién habla?

Emma: Soy Emma, tan rápido me has olvidado

David: No para nada, solo que no reconocí la voz

Emma: ¿Qué has hecho? ¿Me has extrañado?

David: Supongo que sí, disculpa Emma, necesitan el telefóno, pronto te llamaré.

Esa pronto te llamaré quedó resonando en mi cabeza,  nunca me llamó, algún motivo fuerte tuvo que haber tenido , él me quiere y no debo dudar, solo que es diferente a los demás, David no repite la forma de ser de los príncipes azules, él es auténtico :). Pero no lo puedo negar, dentro de mi, muy pero muy en el fondo,hay algo que grita, NO TE MIENTAS!!.