II Reynolds

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Rey un chico cuya vida parecía perfecta, excepto que siempre fue diferente y nunca supo el por que hasta que conoció a Scott, ese chico dio un giro a todo su mundo.

Era un día horrible, y la banda de Reynolds aprovechó la oportunidad para tocar, claro no sin antes recibir autorización, aunque no lo crean el antes era el típico "chico malo", pero al conocer a Scott todo su mundo cambió. Scott no parecía sospechar nada, y eso estaba bien para Reynolds, hasta ahora, le contó que se sentía atraído hacia Dan, Reynolds no dijo nada sólo se dedicaba a evitar la mirada de este chico y sentir envidia hacia aquella mongolita arrastrada que sobrevive a la escuela a duras penas, si el no es todo un Einstein pero es del montón donde están todos.

Scott se alejó si razón y luego vio a Dan caminar hacia el

—Genial—pensó

Mantuvo una charla trivial con aquella niñita creída, tratando de evitar arrastrarla de las greñas como la arrastrada que es, pero verla le daba repugnancia y más porque ahora de repente ella cree que es su amigo lo cual es ahora es imposible, sería mejor que un caballo lo escupiera o contraer la llamarada antes de ser "amigo hipócrita" de esta. Pero no pudo más cuando pregunto sobre Scott, y solo lo soltó las palabras sin meditarlas:

—Scott, él no es parte de la banda. Es un gran baterista, pero le toma mucha importancia a sus estudios...y...gusta de ti—dijo este, aunque trató de ocultar su rencor.

Ella no dijo nada, así que el se dirigió hacia donde se encontraban sus amigos, sin esperar a que ella respondiera. Pero por su rostro sus amigos no le preguntaron.

Tocaron una canción llamada "Between the bars" lo cual empeoró el estado de ánimo de Reynolds y el de todos los presentes. Así que mejor tocaron una canción de Linkin Park llamada "One Step Closer". A muchos les pareció "satánica" (malditos incultos) y llamarón al encargado del orden e hicieron que dejaran de cantar. Por suerte terminaron de cantar justo cuando llegó el encargado, y aunque sólo fueron dos canciones, ambas iban dirigidas hacia Scott.

Triángulo perfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora