"Guardiana de tu corazón"

Cap.5

Narra Marina.

Estaba terminado de hacer que llueva en Holanda,sinceramente este es uno de mis lugares favoritos. Cada ves que vengo me encuentro con mi mejor amiga: Lucía Trovernic.

Es un nombre raro, lo sé. Pero es una buena persona; aparenta 13 años,pero tiene 453 años. ¿sorprendente,no?

Pero, en fin. Empecé a buscar a mi "pequeña" amiga con la mirada,pero no la encontraba por ningún lado.

-Marina!!!- escuche un grito detrás de mi.

Pero antes de volverme a ella,Lucía ya estaba montada en mi espalda.

-Ha!!,Lucía! - le reñi, eso había dolido.

Ella se bajó y se puso en frente de mi.

Lucía: ella tenía el pelo Castaño, ojos verdes,piel bronceada, un vestido de manta color verde claro,unas mallas cafés, botines cafés, una capa verde oscuro que le llega hasta terminar la pantorrilla y también tiene capucha. Lo que más me encanta de ella es que tiene unas hermosa alas de mariposa color verde.

Lucía, espíritu de la primavera.

-Lo siento Marina,pero es que no te he visto desde hace meses- dijo ella con tono exagerado,pero tenía razón.

-Lo se, pero tú sabes muy bien que en está temporada de otoño,tengo mucho trabajo...- dije con voz cansada.

-Ya veo. Pero bueno!, ¿Que te trae por qui?- me preguntó.

-Estaba terminado mi trabajo, ya sabes- le dije casual.

-Ho. Oye!,¿quieres que te presenté a alguien?- dijo ella emocionada por que Que dijo era que si.

-Si,por que no?- le contesté con una sonrisa.

Lucía empezó a descender hacia abajo y yo la seguí. Una vez en tierra firme,ella empezó hacer movimiento con las mano. Una enorme planta-como de 5 metros de altura-,comenzó a crecer de suelo.

-Se llama Toni,es una planta carnívora- dijo mi amiga, mientras acariciaba a la enorme planta.

-Es grandioso- dije,admirando a la planta,pero luego recordé algo.

-Lucía- la llamé y ella me puso atención- ya me tengo que ir,¿te veo luego?-le pregunté.

-Por supuesto,y por favor,visita me más seguido-dijo ella divertida.

-Lo aré- le dije y empecé mi vuelo a Forks.

*

*

*

Aquí en Forks,ya era de noche. Sólo deje caer una fina llovizna,para relajarme un poco.

Pero luego,veo pasar una sombra demasiado rápido, así que la empiezo a seguir. La sombra me lleva a un lúgubre callejón, poco iluminado.

-¿Quién anda ahí? -pregunté a la nada.

-Hace tanto que no te veía, Marina-escuche una voz masculina,familiar para mi.

De la oscuridad, salió esa rata mutante que lleva por nombre: El Conejo de Pascua.

-Conejo! Que alegría verte de nuevo- dije con felicidad fingida.

-Que pena que yo no diga lo mismo-dijo de mal humor, mientras me apuntaba con uno de sus boomerangs.

-Ho! Vamos Conejo,deja el pasado, en el pasado-dije con indiferencia.

-Bueno,el punto es que no estoy aquí para charlar contigo. Es otra cosa-dijo el mientras jugaba con uno de su Boomerangs.

-Entonses?-dije curiosa.

-Señores!-grito y yo lo mire con el ceño fruncido.

Lo cual no duró mucho,ya que algo me tomo de ambos brazos y me metieron en un costal rojo.

Genial.

-Saquenme de aquí!,¡déjenme salir!-comencé a moverme bruscamente tratando de salir.

Escuche algo romperse y luego sentí como volaba en el aire,para luego aterrizar en el suelo.

Eso dolió.

Trate de buscar la abertura del saco para poder salir de el. Seguía buscando y llegó el momento en el cual me llegue a desesperar.

Donde rayos está?!.

Después de unos segundos más encontré la abertura del saco. Cuando salí de el me encontré con nada más y nada menos,que con los guardianes.

-Bienvenida Marina!-dijo un hombre un poco gordo y con una gran barba blanca. Lo cual me dio a entender que era Santa Claus.- ¿disfrutaste del viaje?-Me preguntó.

-Ho!,claro que si!. Me encanta que me metan a sacos y me lancen a...no se donde-dije sarcástica, pero al parecer el no pareció entender.

-Que bien,eso era justo lo que quería escuchar-dijo feliz.- Bueno,creo que ya conoces Conejo.-

-Por supuesto- dije divertida, mientras Conejo me miraba con mala cara.

-Pues ella es Thooth, mejor conocida como El Hada de los Dientes.-continúo.

-Que tal?!-saludo Thooth,y yo sólo le sonreí.

-El es Sadman,el espíritu de los sueños-siguió.

El hombrecito dorado me saludo agitando su mano y yo sólo le devolví el gesto.

-Y por último, Jack Frost-finalizó, yo abrí los ojos como plato a escuchar ese nombre.

-Como? -pregunte incrédula.

-Soy sorprendente, lose,pero no hace falta que actúes asi- se escucho una voz arrogante a mis espaldas.

Me volví a él y ahí estaba. Jack Frost. El espíritu de la diversión y el invierno. Recuerdo cuando me contaban su historia y yo soñaba con encontrarlo algún día,ahora lo tengo aquí, frente a mi.

-Hola-me saludó con una sonrisa.

-Que hay?-fue lo único que pude decir.

Super Marina, super.

Continuará...