Mí vida.

II: Inicios escolares.

Ese día en el que mi madre dijo que debíamos mudarnos. Estaba embarazada, otra vez, ¡De mi padre! y yo no sabía quien era exactamente, recuerdo que le veía y me escondía, creía que era un señor que venía sólo por venir, pero la idea de vivir con él me desagrado demasiado. Cuando estábamos a punto de irnos lloraba, le decía a una de mis "tías" que no me dejara ir, que no me quería ir, pero era imposible, ya teníamos una casa rentada y allí estuvimos los últimos meses de embarazo de mi madre y los tres primeros de nacimiento de mi hermano. Admito que me alegró demasiado el tener un hermano pero aún estaba inconforme con el saber que viviría con mi padre, aunque admito, él se esmero demasiado para que le quisiera, todo lo que quería lo tenía, era, eso era lo único genial.

Al cumplir los tres meses de nacido de mi hermano, mis padres decidieron comprar un apartamento propio en una unidad; Tres pisos: en el primero, sala, comedor, cocina, y un cuartico (muy chico) al que se le llamaba patio. En en segundo piso habían dos habitaciones, la de mi hermano y la mía, y un baño. En el tercero el famoso cuarto matrimonial y un baño (el cual está aun sin terminar y lo usamos para guardar herramientas y las cosas de navidad) "Me gusta esta casa" pensé... Además al frente de la unidad había un parque de diversiones, ¿Cómo no me iba a gustar? En poco tiempo, gracias a la social de mi madre, ya tenía varios amigos de mi edad... Recuerdo que jugabamos a la "cocinita" o a "mamacita", era muy divertido, y como afuera de la casa había un pequeño jardín, allí hacía lo que desde muy pequeña hacía, ¡buscar insectos y cultivar plantas! Era mi rutina, aparte del colegio, claro...

¡Ese colegio! Nazareth, un colegio privado para "riquillos" muy grande pero lleno de niños poco amables, era difícil socializar, así fuese en preescolar. Pero todo cambió al entrar a la primaria, era... Conversaba más, aunque me seguía distanciando mucho de esos niños raros, hasta que la encontré a ella, ¿o ella me encontró a mi?, ¡Stefanía! Mi mejor amiga aun. Desde tercero de primaria me hace compañía, hacíamos locuras, cantábamos y era con la única que me entendía... Ella era diferente... ¡Era humilde! Ella, ¡ella era el inicio de una excelente amistad!