Mí vida.

Segunda parte.

Estaba en un evento recreativo de la unidad. Era amiga de su hermano pero nunca le hable, creía que era demasiado mayor y no me entendería y menos yo a él, aunque la diferencia no era demasiada, yo 13 y el 16.

En ese momento estaba atraída por un joven que siempre me había gustado, Gabriel, y como ya se habían enterado todos Christian se me acercó y me dijo:

-Con qué te gusta Gabriel- se burlo.
-¿A mí? No. Ya no...- no le miraba a los ojos.
-Jajaja ¡Cómo no!- interrumpió el "Chiqui"
-¿Y tu qué?- me defendí y el "Chiqui" se alejó.
-¿Entonces?
-¡Qué no me gusta!
-Bueno, bueno.

Él era uno de los recreacionistas y quería que yo jugara todo lo que estaba allí y eso no me gustaba. A parte de que aun no era lo suficientemente social para hacer esos juegos en publico, no quería, así que no le hacía caso y eso me gustaba, me sentía... Superior.

Sebastian. Él era hermano de Christian, los cuales eran, son muy parecidos. Srbastian mantenía en mi casa y Chriatian, pues él comenzó a aprovechar de ello así que empezó a ir a mi casa también. Jugábamos juegos de mesa, en especial "Astucia naval". Siempre me ganaba, nunca entendí cómo. Hubo incluso un tiempo en el que estuve en "rumboaeróbicos" y él siempre me esperaba.

Era impresionante ver como alguien siempre estaba ahí... me empezaba a gustar. A gustar mucho.

Luego de varios meses me pidió que fuéramos novios. Me demoré una semana en responderle. El día en el que dije sí fuimos a cine e intentó besarme pero no le dejé y me dijo: "Ah... Es un no..." callé, y al dejarme en casa salí a mi balcón y le dije "Sí", un 18 de septiembre.

Al otro día decidió acompañarme a el colegio, últimos dias de clase. Ese día el no me quería soltar, quería un beso y estaba algo nerviosa y para ajustar el no sabía que aun no había dado mi primer beso, y cuando vi que me estaban cerrando la puerta del colegio me despedí con un pico, algo sencillo y fácil, algo de afán en sus labios y me fui, y cuando estaba cerca, me cerraron en toda la cara. Llegué tarde y lo peor, mi director de grupo sabía porque había tardado tanto y por lo tanto no dudo en decircelo a mi madre.