La verdad es que nosotros los hombres siempre estamos buscando estar con la chica de senos grandes, buen trasero, esa la del cuerpazo de infarto para presumir con nuestros amigos. Y me incluyo, la verdad es que eso atrae mucho. Pero hay algo que es cierto y se que muchos me darán la razón. Hablo de que muchos sabemos que no siempre enamora la del físico perfecto y preferimos más a la chica de ojos hermosos, la de linda sonrisa, aquella que te cuida más que a su vida, aquella chica que te está recordando constantemente que te quiere y que nunca quiere separarse de ti, aquella que le encanta que le abraces porque es el único lugar donde se siente protegida, aquella que se pone celosa cuando te hablan otras chicas, aquella chica que se duerme pensando en ti, aquella chica que siempre te está robando una sonrisa con sus travesuras y ocurrencias, aquella que te regaña, aquella chica que te toma de la mano; que no teme presentarte ante sus amigas, la misma chica que cuando le dices algo bonito se sonroja, aquella que prefiere rosas, serenatas o cartas de amor imbes de dinero o autos, aquella chica que te saca lo más cursi, lo más sensible, con la que te ves a futuro, esa persona que por un instante te hace imaginar con los posibles nombres de tus hijos, con esa familia, con la que te ves bien viejito, bien arrugado, aquella mujer que te inspira.
Si una chica provoca todo esto en ti. ¡Cuidala! No la dejes, nunca la pierdas, porque posiblemente jamás vuelvas a sentir esto por otra mujer.
