Capítulo 2 ¡A volar!

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¡Por fin! Por fin seria periodista y trabajaría de lo que me gusta y dejaría aquella asquerosa y maloliente tienda de animales.
-¡A LA MIERDA LA TIENDA DE ANIMALES!-Grito Valeria alarmando a todo el aeropuerto.
Valeria se da cuenta de que todos la miran y se muere de vergüenza. Algunos pasajeros comentan en su idioma: ¿que coño dice? Otros dicen: Espero que esta puta loca no este cerca de nosotros en el vuelo. Y su amiga Miriam la dice: siéntate anda.

Pero la felicidad que siente ahora mismo la hace olvidar todo. Ahora es feliz pero no ha tenido una vida fácil que se diga. Empezando por la separación de sus padres hace 10 años. Su padre se fue a Navarra y se olvido de ella por completo, cuando a Valeria le tocaba ir allí su padre se olvidaba de ella y la tocaba quedarse sola en casa aburrida. Hace 7 años mi madre se caso con otro tío y tuvieron a mi hermana pequeña de 6 años: Margarita. Hace 1 año su prima Iraya (Lo único que tenía en Navarra) se murió de leucemia un gran golpe para Valeria.
-Señores pasajeros vayan embarcando-Dijo la voz de la azafata.
Fuimos pasando uno en uno y en un autobús nos transportaron hasta el avión.
-Todos nos miran Miri.
-Te miran a ti, que menudo grito que has pegado.
Valeria se limitó a sonreír y se propuso a si misma: No volveré a gritar.
Poco a poco fuimos pasando al avión. Nos había tocado justo en el ala.
-¿Ventanilla o pasillo?-Le dijo Valeria a Miriam.
-Ventanilla. Tu ya has viajado mas veces yo no.
Valeria soltó una carcajada.
La voz del avión nos aviso de que había que abrocharse y todo ese rollo. Yo ya me había casi dormido.
-¿Has visto a esos dos de adelante?-Dice Miriam moviendo a Valeria.
Pero Valeria no responde.
-¿No era el tío ese de internet que salió en antena 3?
Ahora si, Valeria mira en seguida. Es guapo, esta bien y es muy simpático y gracioso ( ya había visto algún que otro vídeo )
Después de una hora....

Valeria se despierta y ve que el chico la esta mirando. Sí, es guapo, tiene unos ojos muy bonitos y me gusta como se peina.
Valeria se muere de vergüenza y el chico la sonríe.
-¡Hola! Soy Rubén, me conocerás por el Rubius.
-Ya, yo soy Valeria y tengo 23 años.
-Tienes unos ojos muy bonitos.-La dice Rubén mientras la regala una sonrisa.
Valeria en ese momento se pone tensa y las mejillas ahora mismo son tomates.
-Gra... gracias, tu también.
Los ojos miel de Valeria se pierden en la sonrisa de ese chico tan peculiar.

Y esto es todo! Espero que os haya gustado!

Debajo de un Cocotero #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora