El Principe del Mal (Levi x Reader)

Prólogo: Los hermanos

Nota de Autor: Hola aqui BlackAngel1454 con nueva historia! Es de Levi x Reader y es crossover con el anime Ataque a los Titanes y Vocaloid, es basada en la "Saga del Mal" disfrutenlo!

Prólogo: Los hermanos

Hace muchisimo tiempo, en un pais, habitaba una enorme población de personas, los cuales vivian contentos y tranquilos sus habitantes. Gracias a dos majestades, el Rey Erwin Smith y la Reina Hanji Zoe. Los dos eran personas muy justas y bastantes consideradas, siempre ponían como prioridad las necesidades de su reino y también escuchaban lo que toda la gente de su reino sugería. Todos, absolutamente todos eran felices.

En especial dos hermanos.

En un palacio, muy moderno, elegante y con muebles bastante finos, en la parte de atrás de aquel castillo, había un jardín bastante amplio con una gran cantidad de flores de varios tipos y colores. En aquél lugar, acostada al pie de un árbol había una niña pequeña de aproximadamente 5 años de edad. Tenía el cabello corto (nota de autor: si tienes el cabello largo, sólo por el momento preten que tienes el cabello corto vale?) de color (Tu color de cabello), unos hermosos ojos (Tu color de ojos) y una piel (Tu color de piel) tan suave y tan delicada. Usabas un vestido (Tu color favorito) que te llegaba hasta los tobillos dejando ver tus zapatitos (negros o blancos) de muñeca. El vestido tenía mangas cortas, tenia el cuello en forma de v, dejando ver un collar de cadena y corazón (dorado o plateado), en la cintura del vestido era adornado con un lazo (blanco, negro, o color del vestido). Su nombte era (Nombre) (Segundo nombre, sólo si tienes) Smith Zoe, la hija menor y princesa del país Rose, era la más dulce y bella de todas.

Llevaba tumbada bajo él árbol hace 10 minutos, a ella le encantaba pasar la gran parte de su tiempo libre jugando en el jardín, le encantaba estar afuera, se sentía libre y tan viva, le encantaba hacer coronas de flores o ver el cielo. Era tan feliz con lo que tenía, con todo el amor que la acompañó, estaba tan agradecida y no pedía nada más.

-Oi, ¿cuánto tiempo más vas a estar ahí sentada?- preguntó una voz.

Regresando a ver a su lado derecho se encontraba nada más y nada menos que su hermano mayor el principe Rivaille, aunque tú le decías Levi o Capitán de la limpieza cuándo lo observabas como él inspeccionaba la limpieza de sus sirvientes, la cual encontraba desastrosa. Era un chico de 6 años de edad a punto de cumplir 7, tenía el pelo negro muy corto, y ojos grises, usaba una camisa blanca de botones, su pequeño e impecable corbatin blanco se encontraba atado en su cuello, también usaba un patalon y zapatos negros. Tenía la mirada bastante seria, eran pocas las ocaciones que podías verlo sonreír.

-No lo sé, pero si fuera por mí, me quedaría aquí todito el día hasta el amanecer- le respondiste sonriendole dulcemente.

-Tch, acaso no tienes idea de lo sucio que podría estar tu vestido en este momento- te respondió el pelinegro cruzando los brazos.

-Levi, no te amarges tanto, llevo aquí unos 10 minutos, ni que mi vestido sé ensuciara así de rápido- le respondiste sacándole la lengua.

-Como sea, ya entra de una vez, es hora de un bocadillo- dijo Levi un poco molesto, mientras te ofrecía una mano.

Te reiste en voz bajita, tomando su mano, el pelinegro te ayudo a levantarte. Te parecía tan lindo cuando Levi se fastidiaba, te encantaba estar con él cuando no estabas afuera. Levi a diferencia de ti, era más estricto con el tema de la limpieza y en lugar de estar afuera, prefería estar adentró del castillo, tú tenías que rogarle de rodillas para poder convencerlo de salir.

Dirigiéndose al interior delmpalacio, caminarom hasta llegar a una habitación extremadamente limpia. Tenía una cama muy comoda de edredón azul muy fino, tenía una chimenea en la parte de al frente de la cama, a su lado izquierdo había una repisa llena de libros, y a su lado derecho había un piano negro qué estaba justo a un lado de una puerta que llevaba a un balcón. Esa ers la habitación de Levi. El pelinegro abrió la puerta de su balcón donde les esperaba una mesita con sus bocadillos favoritos, un delicioso flan y té negro. Tú y Levi se sentaron a disfrutar del esquisito bocadillo.

-Levi, ¿no te parece maravillosa la vida?- le preguntaste tomando su mano.

-Sí que lo es, pero es aún mejor cuándo estoy con mi dulce hermana- te respondio, dandote un besó en la mano.

-Levi...-

-¿Hmm?-

-Prometeme por lo menos una cosa, vale- dijiste un poco seria.

-¿Qué cosa?- te preguntó él, viendote con curiosidad.

-Prometeme qué cuándo seas mayor, serás siempre feliz- dijiste para luego levantar tu dedo meñique.

Levi te sonrió y levanto su dedo diciendo: -y tú prometeme que estarás conmigo siempre a mi lado.-

-Te lo prometo- dijiste con una sonrisa enlazando tu dedo con el de tu adorado hermano.