More more Murdoc [YAOI]

Capítulo 1

Pasaron 5 años, 5 largos y lentos años desde que 2D se fue de Gorillaz. A causa de eso tuvieron que disolver el grupo, nadie podía sustituir la voz del peliazul. Murdoc parecía el más afectado en todo esto.

Noodle y Russel creyeron que era porque ya no tendría más fama, dinero y putas. Pero no.

Se equivocaban totalmente.

Murdoc había hecho seguimentos a los amigos del peliazul, a sus familiares, había realizado sacrificios a Satán para que apareciera un día delante suyo... Pero nada.

2D no aparecía.

Murdoc intentaba olvidarse de él, de aquella noche que pasaron en Hawaii, de cómo lo dominó bajo su cuerpo y de cómo gemía su nombre...

Se quiso pegar un puñetazo por esos recuerdos. Quería hacerse el duro, pero no podía evitar el dolor de su corazón. Bebió la copa de whisky que tenía en la mano.

Había empeorado muchísimo. De no lavarse se había vuelto verde, su hígado estaba reventado por haber consumido tanto alcohol y de las drogas ni hablemos... Tenía suerte de no haber contraído una enfermedad por vía sexual.

No había sabido mucho de Russel y Noodle estos años. Supo que Noodle fue a Japón a visitar a su padre y Russel había estado perdido en los sótanos de los famosos. Nada que realzaran sus carreras.

Él estaba endeudado hasta las trancas pero seguía conservando Kong Studios, era lo único que le quedaba. Si no estaban los cuatro no triunfaban. Jamie y Damon se enfadaron y al final tampoco quisieron hacer proyectos juntos. Murdoc bufó.

- Esos gays...- Rodó los ojos y se terminó la copa de whisky. Sintió vibrar algo en su bolsillo, era su móvil.- ¿Quién es?

- Murdoc-san... tanto tiempo.

Murdoc se levantó del asiento, sorprendido. Era Noodle. ¿Para qué lo había llamado?

- ¡Nena! Me pone feliz escucharte.- Se alegró. Noodle rió por ese comentario, el moreno nunca iba a cambiar.

- Escucha Murdoc-san, sabes que he ido a Japón ¿Verdad?

- Sí, ¿Pasa algo con eso?

- Bueno, en mi estadía allí compuse una canción y después otra... y tras canción más canciones formé un álbum al que llamé Demon Days.- Le explicaba.- Quería que le dieras el visto bueno para ver si podríamos volver como Gorillaz y...

- Espera princesa, no sabemos dónde está 2D, no tenemos su teléfono, además tendríamos que juntar a Damon y Jamie y...

- ¡Ya está todo solucionado! Llamé a 2D esta mañana y...

Murdoc se quedó con la boca abierta.

- ¿¡Tienes su teléfono!?- Gritó desesperado.

- ¡Claro! ¿Tú no?

El moreno pensó, Noodle no sabía nada del asunto entre ellos. Más bien nadie lo sabía. Murdoc suspiró.

- Es una buena idea entonces Noodle.- Le dijo.

- ¿Dónde nos reunimos? ¿En Kong Studios?- Sugirió la japonesa.- ¿Lo sigues teniendo no?

- Sí, ¿Por quién me tomas?- Gruñó malhumorado. Noodle rió un poco.

- Perdona perdona. Vamos a ir a las 8, y así cenamos todos juntos, ¿Te parece?

Murdoc le dijo que sí y colgó. Se fue corriendo del bar de mala muerte sin pagar la cuenta ni nada. El propietario casi le lanza una botella al ver cómo se escabullía.

................................................................................................................................................................

2D iba a ir, 2D iba a ir, 2D iba a ir...

Murdoc comenzó a recoger un poco Kong Studios. Estaba lleno de botellas vacías y de charcos de a saber qué. Lo dejó más o menos decente y abrió las ventanas para que se aireara el asunto.

Estaba nervioso, para qué negarlo. Estaba muy nervioso. Hacía mucho tiempo que no veía a ninguno y más a 2D. Creía que durante todo este tiempo le había pasado algo malo. A veces se despertaba por las pesadillas que le inducía Pazuzu, ese diablillo.

Alguien llamó a la puerta y se le subió el corazón a la garganta. Fue a abrir lentamente pero vio que solo era Russel. Se le cayó un poco el mito.

- Ah, hola.- Dijo desilusionado.

- Vaya se nota que te alegras de verme...- Russel había pasado de felicidad a malhumor. Sólo Murdoc podía hacer eso.

- Si no has cambiado nada, no te hagas la víctima...

- Esto... ¿Hola?- Dijo una peculiar voz.

Murdoc abrió los ojos, era 2D. Entró tímido a la casa.

Creía que era un espejismo, tantos años buscándolo y ahora aparece de repente. Estaba muy cambiado pero para bien. Más atractivo y sexy. El moreno creyó que le daba algo pero supo controlar sus sentimientos.

- Sí, hola.- Respondió secamente, cruzando los brazos. 2D casi ni lo miró, así que dejó a Murdoc en ridículo.

Fue hasta Russel y le dio un abrazo.

- ¿Qué tal Russ?- Le preguntó feliz.- Qué de tiempo.

- Sí que es verdad hermano.

Alguien llamó a la puerta. Murdoc fue a abrir y vio a una japonesa... bastante cambiada.

- ¿Y tú quién eres?- Preguntó. Noodle rió.

- ¡Soy yo Murdoc-san! ¿Tanto he cambiado?

- ¿¡Tú eres Noodle!?- Exclamó con fuerza sin creérselo. Russel y 2D se asomaron, también quedaron sorprendidos.

- ¡Qué guapa Noodle!- Dijo 2D alucinado. Y no era para menos, ya era toda una mujer. Traía algunos papeles consigo. Entró pasando delante de Murdoc. Todavía seguía flipando.

Pero no por eso, no por Noodle.

Por fin estaban juntos de nuevo. Más fama, más poder, dinero, giras...

Y más 2D.