Obliviate (Drarry) (Larry)

Cap. 4 "Draco Malfoy"

Miércoles 20/08/1998

2:00 am

El crepitar de la noche era detestable, por merlín que Draco deseaba solo ponerse de pie y caminar de regreso a la escuela olvidando de una buena vez la estúpida raíz que lo había traído hasta este lugar. Se preguntó por unos segundos si Louis no habría sido apresado por alguna de esas plantas también, pero pronto descartó la idea recordando que la ubicación exacta de aquellas pequeñas rastreras era ese, el camino del pedral sobre el musgo. Tomlinson tenía que haberlo desobedecido porque otra razón no encontraba y pensar en otros no era peculiar, por lo que se apresuró en medir la gravedad del asunto, su pierna aún se encontraba dormida lo que lo ponía en desventaja al no saber si las raíces seguían adheridas a su piel.

— ¡Lumos!

Con la varita brillando, se incorporó un poco comenzando a palpar con sus manos toda su musculatura. Draco había encogido las prendas antes pero aun así le resultaban incomodas por lo que finalmente opto que la mejor idea era quitarse los pantalones y pudo haberlo logrado a no ser que descubrió algo antes.

— ¡Por merlín! ¡Estúpida planta carnívora!

Su tobillo no era el único ensangrentado, también la planta de sus pies y aunque sonará increíble Draco no lo había sentido. Notó que la raíz continuaba enroscada en todo su pie y no tuvo más escapatoria.

Alistó su varita frente a la raíz.

— ¡Cistem Aperio!

Ante el hechizo la raíz se sacudió del suelo hasta desprenderse por completo, lo cual logró hacerlo gritar del dolor, cuando la raíz estuvo contra el suelo se arrastró rápidamente hacia él pero Draco fue más rápido esta vez.

— ¡Confringo!

Y la raíz exploto.

Los minutos pasaban y caminar en ese estado no era alentador, casi podía sentir su tobillo desprenderse de su pierna, la planta había ingerido mucha sangre y como desechó parte de su piel, la posibilidad de encontrar un hueso roto estaba descartada, pero el fluir incontrolado de su sangre estaba en aumento.

Luego de caer rendido de dolor, se encontró arrastrándose hacía su varita que había caído un par de metros lejos de él.

Cuando lo oyó.

—  ¡Malfoy! ¡Malfoy!

02:45 am

Luego de despertar a Goyle, quién descansaba haciendo guardia fuera de su puerta, ingresó al interior de las mazmorras en el único lugar que pudo jadear de dolor sin temor a ser escuchado, la planta de su pie podría estar infectada y no necesitaba más razones para saber que tenía que ir a tratarse de inmediato pero no lo hizo. Sudoroso, adolorido y acalorado, ingresó a un compartimento secreto bajo su cama; era una escalera que lo llevaba a los interiores del castillo de Salazar, en un compartimento pequeño donde tenía calderos flameantes, ingredientes ordenados alfabéticamente en griego y por el daño que causaban, y tenía consigo varios libros de hechicería que había robado de la Sala de Menesteres antes que se incendiara.

Preparó un rápido antídoto regenerador; el cual tardo dos horas en comenzar el efecto rehabilitador; crear un antídoto a una maldición era imposible aún para él, pero erradicar los daños que ésta causaba se podían remediar siempre y cuando no era él a quién iba la maldición.

Con la pierna mejor subió nuevamente a su mazmorra, gimiendo aún adolorido cuando su tobillo tocaba la parte inferior de su cama, logro deslizarse hasta uno de los puntos menos conocidos de su habitación; una pequeña curva en la pared verde, la palpo cerrando los ojos mientras susurraba en pársel. Apareció ante él una pequeña bolsa verde con el lazo dorado, que Draco acogió en su pecho quedándose profundamente dormido.