Capítulo 6

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Mauren

Ya llevamos casi un mes en la escuela y la verdad es que no han sido los días muy diferentes, sino rutinarios. Me ha gustado estar aquí, incluso hemos hecho algunos amigos. Los dos, por que la verdad no es que quiera separarme de Dolton.
Resulta que las chicas se nos pegan "como imanes" dirían la bola de imbéciles con la qué nos juntamos, pues según somos guapos y tenemos buen cuerpo. Me da un poco de lástima el que nos hayan catalogado guapos por nuestro físico y que nadie muestre demasiado interés en saber quienes somos detras de la envoltura. Me gustaría más el término "interesantes".
También empiezo a creer que los "amigos" que tenemos solo se juntan con nosotros por que muchas chicas se nos juntan. Y se lo he dicho a Dolton, que tal vez sea mejor evitar ese tipo de amistades, pero es un terco de lo peor.

-Ya te dije, Mauren -sus ojos dan un giro como si lo que le dije fuera una tontería- jamás hemos tenido un grupo de amigos tan grande con el quien juntarnos y sentirnos parte de algo, y tu ahora dices que son conveniencias. Tonterías. Si no te parece, bien. Pero a mi no me haces cambiar de opinión.

Eso me lo dijo hace una semana y sigo pensando en esa última frase que dijo. Mi hermano, él que siempre me ha acompañado y al que yo siempre le he hecho compañía ¿me acaba de decir que me dejaría por una bola de idiotas? Tal vez me equivoque y escuche mal. O tal vez lo he imaginado y jamás hemos tenido esa conversacion. Esperó sea eso, pero ¿y si no?

Hoy se ha puesto algo raro conmigo, aunque no lo culpo. Esta muy emocionado comentando sobre el partido de fútbol de anoche con sus amigos a los que también le gusta el fut. No lo culpo por la razón de que a mi no me ha gustado nunca. Creo que no es más que un juego de perseguir un balón, patearlo y, aunque sea a epujones, evitar que nadie más lo toque.
Al parecer, ese juego que considero aburrido es el mejor deporte del mundo para los demas de la bola.
A excepción de Chris. Y de mi, claro.

Últimamente, después de a mi hermano, le he comenzado a hablar mucho a Chris. Por mensaje y lo poco del día cuando no estoy tan pegado a mi hermano.
Me gusta como es. En cierto sentido somos parecidos. Y descubrí que se junta con todos, como yo, solo por encajar y no pasar al estatus escolar de los "sin amigos".
Los sin amigos. Es un titulo muy cruel, y se lo ponen a aquellos que no andan en manada. Puedes tener dos o tres buenos amigos. Pero para los demás no eres más que un trio de sin amigos, cuando incluso ellos tiene verdaderos amigos en un par de personas que todos los que andan en manada.
Toda está forma de pensar ni loco se la cuento a Dolton. ¿Para qué? La verdad es que lo veo muy agusto y no le veo el caso de incomodarlo. Al fin de cuentas, si a mi no me gusta el fútbol, ¿qué tiene de malo que le haga más caso ahora a alguien que si le gusta? Los partido se olvidan, pero los hermanos se quedan ahí.

Así que he decidido tomarme el primer receso alejado de él. Lo he pensado bien y no creo que una vez, en lo que pasa la emoción de que Italia gano 2-0 contra Rusia, me haga mal a mi y mucho menos a Dolton el irme a tomar el lunch con Chris.
Le digo a Chris que vallamos a sentarnos y lo hacemos.
Mis oidos descansan de las voces graves y los músculos se me aflojan. La verdad estaban muy tensos y ahora, aquí con Chris alejados del ambiente futbolero, se me han vuelto a la normalidad.
Me la pasaré bien hoy y compartiré mas cosas con Chris. La música, las series de TV, incluso si me pregunta sobre mi familia le responderé. Y yo haré lo mismo, por que me interesa saber un poco más de él.
Tiene cara de ser un buen tipo.
Tal vez mañana regrese a la rutina, pues acepto que me da miedo el ya no hacerlo.

Un lío de GemelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora