Capítulo 9

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Mauren

Uno nunca espera levantarse una mañana, ver que parece un buen día, -de esos días en los que las familias americanas salen a pescar- salir para el baño para lavarse los dientes y ver como una madre le da una cachetada a su hijo. A mi hermano. Mi madre.

Yo me quedo parado a mitad de camino de ida al baño y en cuanto los dos me voltean a ver, camino rápido y me encierro en el baño.
¿Se habrá enterado mi mamá?
Bueno, eso era evidente pero ¿cómo?
Salgo del baño de camino a mi cuarto. Pero en eso mi madre me llama.

—Mauren, ven para acá.

Me baja la sangre. ¿Qué hago?
Volteo.

—Si mamá, ¿qué pasa?

—¿Tu sabes el por qué del comportamiento de tu hermano? —trae su cara de madre molesta—

—Por Dios mamá, éste wey que va a saber —contesta Dolton—.

—Mira Dolton, vuelvele a decir wey a tu hermano y tienes dos semanas más de castigo. Y tu hijo, ¿puedes contestar mi respuesta?

Estoy a punto de explotar. Aquí voy.

—Mira mamá, Dolton salió a la fiesta por que...

Dolton me interrumpe, pero lo hago callar.

—...por que muchas de las veces no nos dejas salir, y tener amigos e ir a fiestas con ellos. Mi hermano pudo pasarse un poco de copas, pero es por lo mismo de que casi no salimos. Lo de wey es por que así nos decimos aveces —miento—, no te preocupes tanto mamá.

Veo a mi madre blanca.

—¿Fiesta? ¿Así que fuiste a una fiesta y te enborrachaste? —estaba mirando con cara de ira pura—.

—Gracias, Mauren, ahora si que la cagaste.

Mi hermano se para del sillón y se va a su cuarto y mi mamá lo sigue. Toca su puerta con duros golpes que parece que ésta se derrumbara.
Por Dios, ¿qué he hecho?

Mi mamá le grita un par de cosas a Dolton, que no va a salir el resto de su vida, qué se olvide de la cena, y que ahora en adelante ella ira por los dos a la escuela.
Al ver que éste no responde, se baja con los ojos llorosos y me atrevo a preguntarle lo que acaba de pasar.

—Mamá, ¿a que te referías por "el comportamiento de mi hermano"?

—Me refería a su mala actitud. A que me contestó de una manera tan grosera en el momento que saliste y viste lo inevitable. Y ahora resulta que ayer fue a una fiesta en sabe donde y con sabe quien y yo ni enterada.
Algo tiene este niño. Pero no va a hacer lo que quiera.

Se retira tratando de no llorar enfrente de mi. La entiendo, aunque por más fuerte que quiera parecer, se que esta muy decepcionada por dentro.

Me voy a mi cuarto y me tapo con la almohada y me pongo a llorar. Ahora si que abriste la bocota, Mauren. Todo lo que hiciste ayer para que mamá no se enterara lo dijiste en un par de segundos. ¡Idiota, idiota, idiota! Y deja que llegue papá... ¡Agggg!

Me he quedado dormido.
Me levanto y me froto los ojos.
Me paro de la cama y veo que son las 4 pm. Me dormí 4 horas.
Voy a la puerta y al abrirla noto que piso un papel doblado por dos, con el pie. Cierro mi puerta y me siento en mi cama. Desdoblo la hoja.
Leo.

Estas en problemas, hermanito.

¿En problemas?
¿A que se refiere con problemas?
Me paso el nudo qué se me hace en la garganta, pero en seguida se me forma otro.

Me acuesto en la cama y quisiera dormir sino otras 4 horas, toda la vida.

Un lío de GemelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora