The descendant of Eros

Capítulo 19: Mald*** Pelirroja

Estaba felizmente dormida cuando el ruido de mi despertador sonó, lo apague de mala gana y me di cuenta de tres cosas, la primera que no estaba en mi habitación, la segunda que había un brazo rodeando mi cintura (aunque ahora que lo recordaba me quede en el cuarto de Ty anoche, con Tony) la tercera cosa que note fue a una chica ¿pelirroja? Teñida supongo, un poco mayor que yo, parada frente a la cama viéndome fijamente, se me hacía conocida, cuando lo recordé

- Tú fuiste la que me inyecto el día que llegue aquí - ella asintió y sonrió de una forma diabólica provocando que me estremeciera, aunque aun así Tony no despertó, cosa que necesitaba en caso de que está loca me atacar

- Si yo te inyecte, pero desgraciadamente no te inyecte suficiente suero para que te cayeras por el acantilado y murieras - dijo destilando odio en cada palabra

- ¿Siquiera me conoces? ¿Hice algo para ganarme tu odio? - pregunte

- ¿Conocerte? - rio sin ganas - te conozco más de lo que te gustaría, y lo que hiciste para ganarte mi odio fue existir, crecer, cumplir 15 años y heredar el don de Eros - dijo ella furiosa

- No es mi culpa tener ese don, yo tampoco lo quería en un principio, si quieres reclamarle a alguien el hecho de que yo descienda de Eros ve con mi hermano - dije yo molesta

- De tu hermano ya me encargue - dijo con esa sonrisa que me daba escalofríos y pensé lo peor - Tranquila no lo mate - dijo y bote el aire que no sabía estaba conteniendo

- No entiendo porque te molesta que yo tenga este don, ya que si estuvieras en mi lugar lo odiaras ya que no podrías enamorarte - dije después de analizar un poco la situación

- Eso es lo de menos, odio que lo heredaras porque ahora yo no tendré mis poderes al graduarme, te odio porque mi padre te trata más como a una hija que a mí, odio que tú en menos de 30 minutos lograras conseguir alas y herramientas, cuando yo en 18 años lo único que he logrado es que me digan que me darán mis alas al cumplir mi mayoría de edad - dijo con odio y cierta tristeza

- Alto ahí - dije procesando todo lo que me había dicho - me acabas de decir que Eros es tu padre, y que me tienes envidia - dije y ella asintió - no lo termino de entender - dije confundida

- Niñata retrasada - dijo tuve que contener mis ganas de mandarla a la mierda - Estoy a un año de graduarme aquí y poder ascender a un puesto en el olimpo junto a mi papa y así poder usar mis poderes, pero resulta que llegaste tú y todos mis planes cambiaron

>> Resulta que cuando una fémina hereda el don de Eros, otra fémina no puede tenerlo también, así que yo al ser su hija no pude tener mis poderes ya que apareciste tú, heredaste el don y me arrebataste la oportunidad. Para colmo llegas aquí al olimpo y consigues todo lo que le pides a mi padre ¡Cuando a la que debería complacer es mí! ¡Que soy su HIJA!

>> Y ya que no puedo obtener mis poderes mientras estés viva, opte por matarte, al principio iba a hacerlo al tirarte del acantilado, pero pudiste contra el suero, pero ahora no te voy a matar yo, te hare sufrir tanto, atando a tu corazón y a tus más cercanos, que desearas estar muerta

Me quede estupefacta en mi lugar y temí por todos mis allegados, empecé por mi familia, mi mama, mi papa, mi abuela, mis hermanos, y seguí con amigas, y termine en reparar que de seguro dañaría primero a Dus y a Tony, ya que aunque no lo admitiera, mi corazón se dividía en ambos

- ¿Por qué no simplemente me matas aquí y ahora? ¿Por qué dañar a todos a mí alrededor esperando a que yo me mate y no me matas tu misma? - pregunte desafiándola un poco

- Porque si mancho mis manos con tu sangre jamás ganare mis alas o mis poderes, y entonces me mandaran a ayudar a Hades - me explico

- Pues te lo digo desde ya que tu NO ME DAS MIEDO, y si piensas que te dejare dañar a mis allegados estas muy equivocada - dije tratando de levantarme y zarandearla pero Tony se sujetaba a mi como una sanguijuela