The descendant of Eros

Capítulo 20

Anabell sacó un cuchillo de su espalda, sentí que toda la sangre se drenaba de mi cuerpo, se acercó lentamente hasta donde yo estaba y me hizo un pequeño corte en el cuello, no era lo suficientemente profundo para ser mortal, pero si para ser doloroso y que de él brotara mucha sangre

- Pensé que tu padre habría hablado contigo, podemos compartir el poder, a mí no me importaría – dije mientras cubría con mi mano la herida

- El problema chiquilla tonta es que yo no quiero compartir el poder con una inútil como tu – dijo con odio en cada palabra

- Ten por seguro que iras al inframundo con Hades y te quedaras allí, eres una persona despreciable y no voy a permitir que tu tengas este don – dije retándole, aunque sabía que era mala idea

- Niñata estúpida, quieras o no yo tendré tu don, solo que lo ocupare a mi manera, y haré que los hombres se enamoren de mí, así no tendré que estar tras alguien, si no ellos estarán tras de mi – aunque podía decir que yo la odiaba no pude evitar sentir algo de pena por ella, había sido lastimada y quería venganza

- Aunque el amor parezca y sea una mierda a veces, no es motivo para darte por vencida o querer vengarte – dije tratando de olvidar que tenía su cuchillo en mi estómago, presionando la punta ligeramente

- Tú no sabes lo que es sufrir por amor, o que el chico que te guste ni te note, no sabes lo que es la falta de aprecio y cariño, porque tú has tenido de todo, tienes una familia que te ama, a dos chicos geniales tras de ti, el amor está totalmente presente en tu vida, tú no sabes lo que es el dolor – dijo y presiono más el cuchillo, pegue un chillido pues el corte fue un tanto profundo

- Te equivocas al pensar que no he sufrido, he experimentado todo lo que me dijiste, me han roto el corazón, me han lastimado, he sufrido por amor, pero eso no significa que odie el amor o a las personas que si lo tienen – dije y empecé a sentir como el aire me faltaba

- Me da un poco de pena matarte, pero tú nunca entenderás lo que siento, sé que dije que no podía matarte con mis propias manos, pero tu sangre no me toco, este cuchillo no tiene conexión directa conmigo y no hay pruebas de que yo te haya matado, así que no me pasara nada, que seas feliz en la otra vida, cuando veas lo que haré aquí me agradecerás mandarte allá – dijo alejándose para apuñalarme con mas fuerza. A pesar de saber que su cuchillo seguía apuntándome y que yo me estaba desangrando lentamente, tome un impulso y con las manos extendidas la ensucie con mi sangre tanto como pude, hasta que no pude moverme más pues sentí que el cuchillo me atravesaba, no me importo y tomando sus manos entre las mías lo saque de mi cuerpo y se lo enterré en un brazo, no era un corte profundo, pero si la lastime lo suficiente como para que no me siguiera atacando, cuando me incorpore lancé un agudo chillido pues esta vez la herida era muy profunda, la mire una última vez y su mirada reflejaba horror y sorpresa, con el poco aliento que me quedaba hable

- Nunca harás sufrir a las personas debido a tu mal manejo del amor, estas llena de odio, y no puedo permitir que le hagas daño a la gente – dije mientras sentía como todo se desvanecía a mi alrededor, caí al suelo

Escuche un golpe fuerte y unos pasos dirigirse hacia mí, fui levemente consciente de ser cargada en brazos

- Respira, estarás bien, todo estará bien – era la voz de Dusty

- Dus... – dije en voz baja

- Shhh, guarda tus fuerzas – dijo otra voz

- Tony... – sentía la garganta seca y los parpados me pesaban