The descendant of Eros

Capítulo 22: Tarde de amigas

- ¡Jessie! – grite correspondiendo su abrazo, tenía mucho, pero en serio mucho tiempo sin verla

- Te he extrañado tanto – dijo cuándo nos separamos

- Me has hecho muchísima falta amiga

- Has crecido mucho – dijo viéndome de arriba abajo

- Tú no te has quedado atrás, si no es porque eres mi mejor amiga y te conozco de toda la vida diría que estas mayor que yo – dije con una sonrisa, a pesar de tener a Sara y a Grace, Jessamine era irremplazable

- Tenemos que recuperar el tiempo perdido, estoy segura de que tienes mucho que contarme – sonreí cómplice, la última vez que hablamos ambas nos habíamos dejado en suspenso

- Y tu mucho que explicarme – reímos y luego me dirigí a los chicos

- Gracias por cuidarme, pero hoy será una tarde de amigas – todos asintieron y ambas salimos de la casa

- ¿Vamos a comer algo? ¿Quizás Starbucks? – la mire y negué con la cabeza, yo no era fan de ir a ese tipo de lugares

- Preferiría un helado en el parque de siempre – ella sonrió

- Siempre me pregunte porque te gusta tanto ese parque

- Y siempre te lo preguntaras, pues nadie conoce la razón – excepto la persona con la que la comparto, pensé para mi

- Vamos por ese helado, luego me contaras TODO – dijo haciendo énfasis en la última palabra, era obvio que me iba a interrogar

Luego de comprar unos helados de fresa, nos sentamos en los columpios frente al árbol, un árbol que me traía muchos recuerdos; recuerdos que nunca nadie sabría

- Muy bien, entonces que es lo que encabeza la lista de cosas que te han pasado – dijo Jessie sacándome de mis pensamientos

- Sinceramente no sé qué encabezaría la lista, así que te contare todo desde el principio, empezando por el día en que me entere que era descendiente de Eros... – y así empecé a relatarle las últimas dos semanas, ella simplemente me interrumpía con pequeñas acotaciones y asentimientos, eso me encantaba de hablar con ella, primero escuchaba y después si expresaba su opinión – y pues entonces llego Tyler y casi mata a Anthony – entonces sí que me interrumpió, estoy segura que de haber estado tomando un refresco lo hubiese escupido

- Alto ahí ¿Me estás diciendo que estuviste a punto de perder tu virginidad con Anthony esta mañana? – la sorpresa se notaba en su voz

- Eh... si – dije apenada

- ¡No me lo creo! – grito emocionada, un día de estos me dejaría sorda – Me es imposible pensar que tú, mi mejor amiga, tan recatada, tan buena, tan inocente, con tanto manejo sobre sí misma, se allá dejado llevar por su instintos hace menos de 12 horas – dio grito y me toco taparle la boca

- Si prometes callar y calmarte quitare mi mano – ella asintió y retire mi mano lentamente

- Aun no me lo creo – susurro

- Pues créetelo, aunque yo tampoco lo haga, ciertamente no sé qué me paso esta mañana – sentí en calor en mis mejillas

- Algún día tenía que pasar

- ¡Pero no quería que fuese antes de los 16! ­– ahora que gritaba era yo

- Ni que eso fuese un pecado – dijo con la cabeza gacha

- Anda escupe – dije a sabiendas de que le pasaba algo, pero en vez de decirme algo me escupió

- ¿Pero qué te pasa? – pregunte limpiándome la cara