Misterios de Amor~Ross Lynch~[PAUSADA]

18.¿Celos?

-¿Qué hora es?-pregunto a Ross mientras intento que me suelte.
-Me da igual-murmura- solo quiero estar así por siempre.

Consigo escaparme de entre sus brazos y mirar el despertador. Las 9:00 pm. ¡Tendría que estar en casa! Ross me vuelve a abrazar y me recuesta junto a él. Pasa una pierna sobre mi cintura y de ese modo me tiene totalmente inmovil.
-Ross es muy tarde, me tengo que ir-forcejeo un poco pero no me suelta- Ross son las nueve y tengo que ir a cenar mi casa.
-Quédate aqui.-Dice como un niño pequeño. Me rio.
-Mañana vamos a estar juntos, te recuerdo que me debes un helado y no te va a valer la escusa de que estas cansado-bromeo.

Protesta un poco pero finalmente me suelta. Me da un corto beao en los labios y sonríe como si fuera Navidad. Yo también lo hago. Le paso la mano por el pelo y sonríe aún mas, creo que eso le gusta.
-Te quiero.-dice con los ojos cerrados y una gran sonrisa.
-Te quiero.-le beso una vez mas-nos vemos mañana.
-Te mando un mensaje-dice estirandose-por la mañana tengo ensayo con los chicos y no se cuando voy a terminar.

Beso de nuevo sus dulces labios. Irresistibles. Soy adicta a los labios de Ross. Me levanto de su cama y salgo del dormitorio. Camino silenciosamente. No hay nadie en el salón. Me asomo a la cocina y veo a Stormie cocinando alegremente.
-Adiós señora Lynch, quiero decir, Stormie-me corrijo sonrojandome-Un places haberla conocido.
-Lo mismo digo Clarie-besa mis mejillas- vuelve pronto.

Salgo de la casa y camino a paso apresurado hacia la mia. En el camino medito todo lo ocurrido. Ross dice que me quiere. Lo vamos a intentar. Quiere ir poco a poco, lo que agradezco. ¿Somos ahora novios, pareja, mas que amigos? "Que importa eso? Os quereis y estais juntos, no es necesario clasificarlo de ninguna manera" Cierto, no tengo porque llamarle de ninguna manera de momento, así estamos bien.

Llego a casa cinco minutos despues. Abro lentamente la puerta con esperanza de que no me oigan llegar tarde. Subo muy despacioas escaleras y cuando estoy a punto de lograrlo, mamá sale de su dormitorio.
-Clarie, ¿sabes donde está tu hermano?-me pregunta- ¿y donde estabas tú?-dice con las manos en las caderas.
-Con Ross-digo lo mas inocente que puedo.
-Si, ya lo sé, he visto la nota. Llegas tarde para la cena. ¿Donde está Henry?
-Con...-¿le digo a mamá que Henry tiene novia?- Con los hermanos de Ross-En cierto modo es verdad...
-¿Y porqué no habeis venido juntos?-dice con sospecha.
-Porque no lo estabamos.
-Ah- mamá se queda pensativa un rato- está bien, vamos a cenar.

Nos sentamos en la mesa. Estamos las dos solas, papá hoy tenía turno de tarde y llegará sobre las 11:00pm.

El estofado de carne esta comestible. La práctica hace al maestro, o eso dicen.

Cuando termino de ayudar a mi madre a recojer los platos de la cena subo a mi dormitorio. Me pongo mi pijama y cojo el teléfono del bolso. Ya tengo un mensaje suyo esperando.

De:Ross
Espero que duermas bien. Soñaré contigo, como todas las noches desde que te conozco. Te quiero.

Para:Ross
Soñaré con super estrellas, sobre todo con una muy especial. Yo también te quiero.

Me recuesto en mi cama y sueño con hermosos ojos marrones, suaves cabellos rubios, dulces besos y super estrellas que me aman.

Me despierto con una gran sonrisa en mi cara. Son apenas las siete de la mañana pero he dormido tan bien que me siento revitalizada.

Bajo a desayunar alegremente cuando oigo a Henry y a mi padre discutir en la cocina.
-Tenias que haber llamado, tu madre ha estado preocupada toda la moche- ¿Henry no ha dormido en casa?- Y cuando vaje tu hermana...¿Desde cuando miente a tu madre de esa manera? Y molestamos a los señores Lynch para nada ¡Que vergüenza Henry!
-No eches la culpa a Clarie papá, ella no sabía donde estaba ni con quien.
-¡Y esa es otra! Espero que no hicieras algo imcoerente con esa chica.
-Solo queriamos estar un rato solos, sin sus hermanos que la persiguen a todas partes-sé que a puesto los ojos en blanco-Papá, no hemos hecho nada malo, alquilamos la habitación, cenamos y dormimos juntos ¡pero no la toqué ni un pelo! Es demasiado pronto...