Ojos color fuego [Terminada]

Capítulo 40

Capítulo dedicado a...Samy_scarl disfruuutalo!!! :D Gracias por todo<3

El papel rosa había pasado por todas las manos, todos trataban de descifrar de donde o por qué una carta que tenía esto escrito iba dirigida para mí. Eric se quedó callado unos minutos, mientras todos empezaron a querer hablar. Apolo todavía seguía con el cejo fruncido y trataba de no perder los estribos con tantos gritos. Pero yo no me fijaba en todos, me fijaba en Eric. Su mirada era... rara, no sabría definirla. Cuando se paró y miró a todos, supe que iba a pasar algo.

-¡Cállense!-gritó-Dejen de cotorrear. Ese mensaje no es solamente para Thea, es para mí también.

Al terminar de decir esto, todos estaban mirándolo como si fuera un bicho raro.

-Veo que no sabes leer.

Dijo Will. Lo miré de mal modo, y suspiré.

-¿Qué quieres decir con eso?

Dije algo insegura. Eric me regaló una sonrisa torcida, la cual me agradecía.

-Cuando era pequeño, mi padre me hizo ver "El Padrino". Desde ese día se nos hizo costumbre ver en todos mis cumpleaños y en los suyos, esa película. Estábamos solos, no teníamos a nadie más... -nos miró a todos y refregó sus palmas por sus jeans-esa frase, es mi favorita, pertenece a una de mis partes favoritas.

Mi boca se abrió un poco. Si eso es verdad, entonces esta carta no era para mí.

-Pero eso no quiere decir que no sea un mensaje para Thea también-terminó de decir-esa frase dice mucho más entre líneas de lo que parece. Creo que él sabe que nosotros sabemos que hay un intruso.

Eric se sentó cómodamente otra vez, como si lo que hubiera dicho no fuera tan importante. Miré a Apolo y estaba mirando a Eric.

-Entonces el intruso sabe también, de alguna manera Aaron se habrá enterado. Está ayudándonos a descartar personas.

Dijo Apolo. Will lo miró y bufó.

-Claro, el hombre que nos quiere muertos, nos está ayudando.

-Tal vez quiere que nosotros sepamos quien es el que trabaja para él-Freya puso una mano en el hombre de Will, y me miró-¿Thea? ¿Qué dices?

-Creo que uniendo todo lo que ustedes dijeron, tenemos una respuesta-dije-Aaron nos está haciendo jugar un juego, un juego en el que va a tratar de confundirnos, y enfrentarnos entre nosotros. Pero yo creo y confío en ustedes, sé que esta es una pista para que descartemos a todos los del colegio excepto...-no quería decirlo, pero en este momento, donde la razón volvía a mí, y las palabras de Eric rebotaban en mi cabeza...-nuestros amigos más cercanos, y quiero decir los míos y los de Eric. Porque eso es lo que quiso decir en la carta. Se refiere a mis amigos por el nombre en la carta, y a los amigos de Eric por la frase escrita.

-Pero Eric tiene tus mismas amigas...

Dijo Freya más para sí misma. Sentí como mi pecho se contraía, y la mirada de Apolo me quemaba, sabía que él no iba a querer creer que estaba considerando a Emma y Eme como una amenaza.

-Exacto.

Terminé de decir eso, los miré a todos, y salí del cuarto. La frustración hizo que mi fuerza se desvaneciera, y las lágrimas querían empezar a brotar, así que lo mejor que podía hacer era irme.

No miré si Apolo estaba detrás de mí, solo salí al jardín a tomar aire. Ya no había nadie, porque se había puesto fresco, pero no sentía nada, ni siquiera el aire.

-Thea.

La voz de Freya me asustó. No sé por qué pero cuando las lágrimas empezaron a salir, no las pude parar. Los brazos de Freya fueron más reconfortantes de lo que alguna vez pensé que lo iban a hacer.

-Oye, te necesito fuerte-dijo-no puedes llorar porque piensas que una de tus mejores amigas trata de matarte.

El chiste negro hizo que me ría un poco. Apoyé mi cabeza en su hombro, ya que es mucho más alta que yo, y empecé a respirar.

-Eso es... respira, siente el aire. Es tu verdadera amiga, ¿sabes? El clima. Tú eres la que lo puede controlar. Tenlo en cuenta cuando sientas que te falta el aire.

Sonreí, al notar la verdadera Freya. Una chica que a pesar de toda su rudeza, actúa como mamá osa, y defiende en lo que cree.

-Gracias-dije, apenas con un hilo de voz.

-Espero que no te pongas mal porque no vino Apolo-noté la sonrisa en su voz.

-No-me aparté y limpié mi cara-no lo hago, de hecho me alegra que hayas sido tú.

-problemas en el paraíso?

Sonreí.

-No, es que... a veces es bueno hablar con una amiga. Hoy parece que fue mi día de suerte.

Freya sonrió y tomó mi mano.

-Vayamos adentro, está enfriando bastante.

Fruncí el ceño y supe que algo no estaba bien conmigo. No sentía el frío.

La fiesta había sido, después de todo, un lugar para conseguir otra pista, además de ser la peor fiesta a la que haya ido jamás.

-¿Entonces la pasaste bien primo?

Preguntó Emma mirando por el retrovisor. La cabeza de Eme estaba apoyada en su hombro, sonreí al ver, inocente, tranquila...

-Si, la pasé muy bien.

Emma sonrió.

-Dejaremos que Eme se quede en mi casa-me dijo Em mirándome-asi que te dejaré en tu casa.

Le sonreí y miré a la ventana. Habíamos acordado a los chicos, a irnos como habíamos venido. Emma había estado bailando con Eric, y había tomado unos tragos, pero pasó tanto tiempo que está igual de lúcida como cuando vino.

-Está bien, gracias.

Sonreí y volví mi mirada a la ventana. Las calles estaban vacías, no es que estemos en barrios muy concurridos, normalmente hay más personas en la calle en el fin de semana, pero ahora no había nadie. Incluso Em había prendido el calefactor del auto, pero ni siquiera sentía eso, mi cabeza no paraba de volver atrás y recordar la carta. La carta que inculpaba a una de mis dos mejores amigas. ¿Tenía que hacer una elección? ¿Cómo podría hablarles?¿ Les tengo que decir lo que soy, y tal vez esperar a que alguna me clave un cuchillo por la espalda?

-Thea, hello, ya llegamos.

La voz de Emma me despertó y la miré.

-Uh, ah, si, lo siento-reí-estoy un poco dormida.

Emma asintió mordiéndose el labio y no creyendo nada de lo que decía.

-Esta bien, llamame por si quieres salir a tomar algo mañana.

-No creo que pueda-dije rápidamente, más de lo que hubiese querido-tengo que estudiar.

Levanté los hombros y abrí la puerta.

-¿Pero tal vez en la semana?

Em me miró bajar del auto, y revolviéndose el pelo asintió.

-Okay, cuídate.

-Lo haré.

Caminé hacia la puerta y escuché que el auto de Emma se iba, así que suspiré y empecé a abrir la puerta cuando una mano se posó sobre la mía y la cerró.

-No tan rápido.

Holaaa, ya se, ya se, estoy re tarde con el capitulo. Me pasaron muchas cosas esta semana y la anterior, cosas del colegio y estuve enferma, además la imaginación me está fallando con tanto estudio D: jajaja, así que perdonen si los hice sufrir mucho. NO prometo que pueda subir todos los viernes, ya que estan cerrando notas y me tienen del cuello, pero prometo escribir más. 

Loos quiero mucho, gracias por votar y comentar <3 Dejenme sus estrellitas, ayudaría muuchisisisimo. 

<3Saludos<3