Capitulo 4

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(Yukhi)
Me salvé porque el profesor me nombró por mí apellido sin embargo esas chicas se traen algo, espero que no hayan descubierto que soy yo.

Luego que ellas me siguieran y empezaron a preguntar sobre mi me sentí incomoda, lo que me toco fue irme y dejar que todo se aclararía mañana.

Al llegar a casa no sabia que hacer no dejaba de pensar, en que querían de mi ahora, Ghoenyi se me acercó
-tranquila ya estas en casa no pasa nada, quizás quieren ser tus amigas quien sabe- decía mientras alzaba las manos en señal de paz.

Luego de dormir un rato, desperté en la noche estaba muy frustrada no sabia que podría ocurrir mañana. Ghoenyi se la pasaba flotando y riendo por toda la habitación mientras yo terminaba la tarea,él me ofreció ayuda pero seria malo ya que si posee a una persona al salir ellos no recuerdan nada, así que si ellas le preguntan después le parecería raro y tampoco quería que las asustará aunque lo merecieran después de todo.

Pero bueno no me quedo de otra, las tenia que enfrentar, Ghoenyi quería ayudarme, pero yo lo convencí de quedarse en casa,con tal no creo que sea peor de lo que ya había sido.

(Ghoenyi)
No se como hizo Yukhi para convencerme que me quedara, estaba muy impaciente quería saber que ocurriría en la escuela.

Mientras pensaba en los resultado que pudiesen dar me acosté en el sofá a esperar, estaba con algo de sueño así que salí de la casa y me acosté en las nubes

[Sentía mucho frío y me salían lágrimas de los ojos pero sin razón alguna, es raro se supone que no debo sentir ya que estoy en estas condiciones. De la nada se me vienen imágenes de cuando estaba mucho mas pequeño, estaba escalando un árbol para buscar la pelota que se había quedado atascada, perdí el equilibrio y me caí pero un señor me atrapo -hijo no hagas eso es peligroso, te puedes lastimar y tu madre se pondría triste. que tal si me dices la próxima y yo la busco, para que no tengas que subir al árbol. ¿te encuentras bien?ten cuidado puedes caerte y yo no estar para atraparte.- dijo el señor disimulando el susto con una sonrisa, yo lo que hacia era reírme mientras me alejaba decía -claro papá, pero tu siempre estas hay para atraparme]

El señor era un poco joven para ser mi padre no se parecía a mi en nada. tenia el cabello corto castaño oscuro, los ojos de color marrón con algunas partes verdes, piel blanca y media como 1,80 mts.

Al despertar note que estaba lloviendo, veía las gotas caer desde las nubes en las que estaba durmiendo. a lo lejos vi un señor muy parecido a mi padre, me acerque pero escuche que alguien me llamo, al voltear no había nadie y cuando volví a buscarlo ya lo había perdido de vista.

Regrese a casa de Yukhi, estuve tarareando la canción que me relajaba y al poco tiempo me dormí de nuevo.

Yukhi llego y me despertó estaba muy alegre, la mamá la llamo para que comiera, yo la espere en el cuarto para que me contara como le fue.

(Yukhi)
había llegado temprano a clases me senté en el pupitre, el profesor estaba leyendo un libro mientras esperaba que tocaran la campana de entrada, ya habían llegado varios compañeros de clases los cuales empezaron a preguntarme de donde venia y todo eso que le preguntan a los nuevos. yo no dije mentiras, les conteste todas las preguntas, claro evitando que se notara que no era nueva.

Sonó la campana y comenzó la clase las chicas estaban sentadas atrás, no pudieron conversar conmigo porque casi llegaban tarde, el profesor las mando a sentarse atrás y que al salí el hablaría con ellas.

En el recreo estaba comiendo mientras veía a los chicos jugar, uno de ellos se hacerlo corriendo, golpeó la cerca y grito. Yo del susto grite y se me salieron varias lágrimas, -no llores Anaya tan solo quería asustarte, es que tienes rato viéndonos tan concentrada que es raro para una chica, la mayoría solo nos ven jugar por obligación, me entiendes o es que acaso te gusta algunos de los chicos- dijo mientras se reía de mi.
-no es lo que piensas y no es gracioso, yo solo miraba el juego pero si te molesta puedo irme- dije mientras me levantaba para alejarme y me secaba la lágrimas.

El fantasma sin recuerdoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora