Soy Tu Prima: La Hija de... ¿Sirius Black? [HP. 2nd Generation]

1.- 10 Años Después.

--¡Despierta Andrómeda! -- gritó Nymphadora en mi oído.

--¡No me llames Andrómeda! -- exclamé tapando mi cara con la almohada.

--Pero qué ánimo para ser primero de agosto -- canturreó haciendo que despertara de un salto --. Feliz cumpleaños número once, primita.

  Nos abrazamos con emoción, ella esperó a que me despojara de mi pijama y bajamos entre risas jugando con nuestra metamorfomagia. Para tener dieciocho años, Dora a veces es muy inmadura.

--Buenos días -- saludé a mis tíos cuando llegamos a la cocina y ambos se acercaron a abrazarme.

--Feliz cumpleaños, linda.

--Te preparé el desayuno que te gusta -- dijo mi tía y todos nos sentamos a comer.

  Cuando estábamos recogiendo la mesa, una lechuza entró por la ventana abierta y se quedó parada en el comedor; corrí hasta ella, casi dejando caer los platos en el proceso, y le quité la carta del pico. Ni siquiera vi si decía mi nombre pues me bastó ver el sello escarlata para abrirla, ¿para quién más podría ser si Dora ya terminó la escuela?

COLEGIO HOGWARTS DE MAGIA

Director: Albus Dumbledore (Orden de Merlín, Primera clase, Gran Hechicero, Jefe de Magos, Jefe Supremo, Confederación Internacional de Magos)

Querida señorita Black:
  Tenemos el placer de informarle de que dispone de una plaza en el Colegio Hogwarts de Magia. Por favor, observe la lista del equipo y los libros necesarios.
  Las clases comienzan el 1 de septiembre. Esperamos su lechuza antes del 31 de julio.

Muy Cordialmente,
Minerva McGonagall,
Directora Adjunta.

  Grité y corrí por toda la casa, la emoción que sentía era enorme.

--¡Dora! -- grité abrazándola -- ¡Dora, voy a Hogwarts!

--Ya lo sé, enana -- rió conmigo.

--Enviaré la lechuza -- dijo el tío Ted antes de salir de la cocina.

--Tía, ¿podemos ir al Callejón Diagon? -- pedí con una gran sonrisa, ella solo reía.

--Claro, cielo, vayan a recoger sus cosas e iremos en un rato.

--¡Vamos Dora! ¡Apresúrate! -- exclamé mientras corría a las escaleras.

  Una hora después estábamos viajando por red flu a El Caldero Chorreante, donde todos estaban conmocionados y hablaban sobre Harry Potter; seguimos adelante sin perder tiempo, saludamld a Tom y pasamos al pequeño patio cerrado qie sirve de entrada a El Callejón Diagon.

--¡Aquí, aquí! -- apunté el ladrillo que se debía tocar con la varita, sin darle tiempo si quiera de contar los ladrillos a mi tío. Todos rieron por mi entusiasmo.

  Cuando se abrió la entrada me pareció mucho más hermoso que todas las veces anteriores en las que había visitado el callejón mágico.

--Muy bien, hay que repartir tareas -- decretó Tía Andrómeda --. Teddy, ve por los materiales; Dora y yo iremos por los libros; Sofia, ¿puedes ir tu sola a Madame Malkin? -- asentí emocionada de que me hayan dejado ir sola a un lugar --. Bien, nos vemos en el Emporio de la Lechuza en media hora -- dijo y todos nos separamos.

  Llegué rápido a Madame Malkin, no sin antes hacer una rápida parada en la tienda de Quidditch para observar la bellísima Nimbus 2000, había un enorme hombre parado en el escaparate y cuando iba a entrar estaba saliendo nada más y nada menos que Harry Potter e iba hacia ese hombre ¿Cómo podría ser mejor este día?