Mudo- Harry (versión corta)

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Y cuando Sammy no regresa a la cafetería en los siguientes tres días, Harry Styles sabe que la ha cagado. En grande.

¿Cómo remediarlo? Si aunque se lo propusiera no podría encontrarla. Solo sabía que se llamaba Sammy, que la lluvia la fastidiaba y que usualmente lleva un enorme suéter azul.

Y entonces se encuentra bufando inaudible y escondiendo la cabeza en sus brazos.

¡Maldita mudez!

Toda su vida intentó no culpar a su incapacidad de sus problemas pero hoy todo se trataba acerca de aquel estúpido problema.

Las personas iban y venían en la cafetería, los pies de Harry no dejaban de taladrar el piso. Sus manos eran pegatina y sus ojos fijados en la puerta.

Pero Sammy no aparece.

Es el día tres, y Harry está perdiendo la lucha contra la impaciencia. Y no puede creer que una estúpida incapacidad imponga tantas barreras en su vida.

¿Por qué tenía que ser así?

Sus padres lo habían enviado una vez a un encuentro de adolescentes mudos. Él tenía diecisiete, lo odió. Pero lo que más odió, fue que la mayoría de aquellos chicos tuviesen una vida mucho más plena que la de él. Odiaba que tuviesen novias, fueran de fiesta y tuviesen las formas más remotas de comunicarse.

Harry no tenía nada de eso.

Y entonces se pregunta si es la mudez que pone barreras a su felicidad o si es el mismo. Porque ahora que lo piensa bien, él nunca había luchado contra ella. Solamente la había dejado ser, había decidido vivir con ella.

Harry no quiere vivir bajo sus propias barreras. Harry decide sobrepasarlas.

Toma su cuaderno, ese que usa únicamente para emergencias, ya que él no habla con las personas porque sí, y comienza a escribir. Reconoce a la misma chica que Sammy siempre saluda atendiendo, y sin pensarlo dos veces se levanta.

Se levanta tan abruptamente que la silla tambalea haciendo un escándalo. Y aunque hay solo cuatro personas en la cafetería, todos los ojos se posan en él. Avergonzado, camina cabizbajo hasta el mostrador.

- Hola, cariño ¿Qué puedo servirte?

No le gustaba la confianza de la chica, siempre la captaba haciéndole ojitos y tomándose su tiempo para atenderlo. Así que se limita a sacudir la cabeza y sin mirarla deslizar el papel.

Ella frunce el ceño, y mientras lo lee, Harry juega con sus dedos queriendo creer que esto no está sucediendo. Que no acaba de humillarse para ir tras una chica que solo sabe su nombre.

- Sammy, por supuesto que la conozco - La rubia saca una lápicera - Estudia a unas pocas calles, te dibujaré un mapa.

Y Harry nunca se había sentido tan radiante. Sammy. Había un camino a Sammy.

La esperó durante tres horas. Sin exageraciones. Llegó a las tres de la tarde y no divisó su melena oscura hasta que dieron las séis.

En esas tres horas inventó y reinventó cien planes distintos para cuando ella saliese. Pero en el momento en que la vio, con sus cabellos volando rebeldes por la brisa, riendo con dos compañeros, olvidó cada uno de los pasos.

Esperó a que se despidiese y se acercó sigilosamente, más bien torpemente, en cuanto estuvo sola. Las manos le sudaban, el corazón le disparaba y cuando a medio camino, Sammy lo vio, él juró que se desmayaría.

Los ojos cafés de Sammy se abren con sorpresa, parpadeando varias veces como si intentase creer si era real o no.

- ¿Harry? - Cuestiona confundida, cruzándose de brazos sobre su pecho cuando él se planta, en silencio obviamente, frente a ella.

Entonces le entrega un segundo papel, que ella toma confundida.

El nombre es Harry y la pregunta es ¿Me perdonarías por no atreverme a decirte que soy mudo?

La reacción de Sammy es fruncir el ceño, juntar sus labios pensativas y dirigirse a él.

- ¿Por qué no me lo dijiste? - Dice con su voz tan llena de alegría como siempre, Harry respira aliviado - Creí que te habías enfadado por entrometerme.

Y ahora es Harry el que frunce el ceño.

- Tú sabes... Los tatuajes y...

Las manos de Harry se alzan frente a ella mientras niega con un movimiento de cabeza.

Sammy sonríe.

- ¿Qué tal un café? 

Y solo basta una sonrisa para que ella sepa la respuesta.

-

Espero que les esté gustando, queda poco para el final :)