Me di cuenta que no tenía como pagar la cuenta así que le pregunté a Scott si tenía algo de dinero, pero el muy imbécil olvidó empacarlo.
- Yo tengo dinero- respondió Hiunha sacando un fajo de billetes de su mochila.
Yo la miré algo sorprendida y con duda, pues traía mucho dinero - ¿De dónde sacaste tanto dinero?- le pregunté.
- Es de la larga historia que te dije, estúpida.
- Nunca me había atrevido a insultar a J, ¡Mierda! Otra como J- dijo Scott sorprendido.
- Niña, me caes bien- le dije ya que había que admitir que la chica tenia valor al insultarme.
- Si, bueno, no importa ¿pagamos o qué?- Dijo Hiunha un tanto aburrida, y eso hicimos, pagamos y fuimos a un teléfono público y le hablamos a nuestra amiga.
*Llamada telefónica*
- ¿Halo?- dijo la voz de una mujer.
- Si, hola soy yo, J, te hablaba para saber si te encuentras en casa, ¿tienes la misma dirección cierto? Es que quiero hacerte una visita.
- ¿Cuál es el truco? Tú nunca me visitas a menos que estés escapando.
- No puedo visitar a.... Okay está bien necesito posada y ropa nueva, ¡oh! Y también una ducha.- le dije ya que sabía que diciéndole cosas dulces y amigables no iba a conseguir nada, ella ya me conocía lo suficiente como para saber que yo no soy así.
- ¡En serio! Bueno ven, espero que no hayas olvidado las calles de Grecia.
- No, claro que no las he olvidado, ya llegamos allá.
- Espera dijiste ¿llegamos? ¿viene Scott contigo?-Dijo con tono esperanzado pues para ella Scott era su gran amor platónico pero, bueno Scott ya tiene sus ojos fijados en alguien.
- Si, Scott viene conmigo.- Respondí observando a Scott con una sonrisa burlona.
- ¡Oh! ¿¡Sigue con su obsesión!? Ya no hay paz en este país- dijo Scott
- Ah y nos encontramos a otra chica, la llevaremos con nosotros.
- ¡Aggg! ¡Es que mi casa no es hotel J!
- Recuerda los miles de favores que me debes.
- Oh, por Dios, no puedo creer que me estés echando en cara esto... Bueno, puede venir.
- Okay, me alegro que estés de acuerdo.
- Tu siempre manipulándome.
- Jajaja, si lo sé, pero aún me quieres.
- Aggg, si, si como sea, aquí te espero.
*fin de la llamada telefónica*
Cogimos un taxi y nos dirigimos a la casa de mi amiga Chelsea, la casa era como la recordaba. Tenía puertas corredizas de vidrio y unas ventanas muy bonitas, la casa era de tres pisos y tenía un jardín muy lindo con flores de varios colores y una fuente con la escultura de un delfín en esta, simplemente era una casa envidiable.
Scott corrió para entrar a aquel lugar, si no paraba ahora mismo su velocidad él iba a chocar contra la puerta, y ¿adivinen qué pasó?, el muy imbécil chocó contra la puerta, apuesto a que el muy tonto ni siquiera sabía que la casa tenía puertas de vidrio.
- ¡Ahhh! ¡Mierda!
- ¿¡Estás bien rojito!? Jajaja
- ¡Ja-ja-ja muy graciosa J!
- Ven, levántate bruto- dijo Hiunha con un susurro y extendió las manos hacia él para que se levantara.
- Hola Scott - Dijo Chelsea abriendo la puerta y saliendo para saludar a Scott - Muy linda primera impresión.
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Iron Heart
Science FictionJ y Scott, dos adolescentes que vivían en un tranquilo desierto lleno de magos y monstruos de forma normal, según sus términos. Cuando de repente algo ocurrió, ocasionando que abandonaran su hogar. En el camino se encontraron con Hiunha, una chica c...