Capítulo 2

31 4 0
                                    

Hiunha

Hiunha...

Hiunha...

Hiunha...

Escuchaba algo así como un susurro lejano, intenté abrir mis ojos pero no veía nada, todo era borroso.

Cuando mi vista logró recuperarse un poco pude ver una silueta borrosa, y supe que era mi hermano Melthom, traía el ceño fruncido y se veía ¿asustado?, no lo sé, no pude terminar de descifrar su rostro ya que me percaté de que el lugar donde estábamos no era mi casa, más bien parecía un hospital, pero, ¿qué me había llevado ahí?, ¿un accidente de auto? ¿De nuevo me caí de las escaleras? Le pregunte a Melthom que es lo que me había pasado pero él me miro con una cara de consternación.

-¿No lo recuerdas?- me preguntó él.- No puede ser que tú tampoco recuerdes.

-¿Qué?, n-no entiendo ¿a qué te refieres?- dije con un tono asustado y desconcertado, porque, enserio, no recordar lo que pasó anteriormente y luego despertar en un hospital, esto me está asustando...

-Bueno la verdad es que yo tampoco recuerdo mucho, lo único que sé es que estábamos en casa empacando y no me preguntes para que porque tampoco lo recuerdo.

Es algo irreal el hecho de que hayamos perdido solo un pequeño fragmento de nuestra memoria, no tiene sentido, todo estaba ahí, mi madre, mi padre, mi cumpleaños, todo, pero lo que faltaba es ¿Cómo y por qué estábamos ahí?

- Bueno no nos vamos a quedar en esta habitación.- dije con un poco de firmeza, mi madre no estaba así que tenía que tomar el cargo de hermana mayor.- Tenemos que averiguar algo.

Inmediatamente me levante de la cama en la que me encontraba y observe a mi pequeño hermano, tan solo tenía 14 años, me quede mirándolo mucho tiempo, sus ojos café oscuro, muy iguales a los míos, recuerdo un día en el que estábamos tomando café en el patio de la casa y nos pusimos a comparar el color del café con el de nuestros ojos, hicimos muchos chistes raros sobre ello y de alguna manera terminamos hablando sobre porque los perros olían sus colas, lo sé, extraño. No me di cuenta de que estaba mirándolo tan profundamente con una sonrisa torcida en la boca, hasta que él se remueve algo incómodo.

- ¿Por qué me miras tanto?- me pregunta un poco nervioso

-No sé, tal vez solo quiero comprobar que ningún otro recuerdo me haya sido arrebatado.- Hey, no me culpen, despertarse en un hospital, no, un hospital no, ahora que veo mi alrededor me doy cuenta de que de hecho es una enfermería, ¿Acaso estábamos en el colegio?, bueno ya veremos, como decía despertarse en una enfermería sin saber que paso no es normal, solo me quería asegurar de no haber olvidado nada más.

Salimos por la única puerta que había en aquel lugar y observe mi alrededor y si, estaba en lo cierto estábamos en un colegio, ahora el problema consistía en que este no era nuestro colegio. Salimos al pasillo y nos encontramos con una anciana de unos 60 años, era la única mujer mayor que veía por ahora ya que al parecer todos eran como de nuestra edad.

Con paso decidido me acerque a ella necesitaba saber dónde nos encontrábamos, Melthom caminaba un poco nervioso a lado mío, era de esperarse el pobre debe de estar asustado.

-Disculpe señora, ¿nos podría usted decir en dónde estamos?- le pregunté.

-¡Oh! Querida me imagino que son de los recién llegados, ustedes están en un internado.- respondió la señora como si fuera lo más normal del mundo, yo la mire con mis ojos bien abiertos, esto es imposible, tal vez no recuerde como llegue aquí, pero de algo que si estoy segura es que mamá jamás me dejaría en un internado y mucho menos a Melthom.

Iron HeartDonde viven las historias. Descúbrelo ahora