Capítulo 8

20.4K 1.1K 64
                                    

         

Miro a Tomy que esta parado al lado de nuestra mesa esperando que le digamos que es lo que tomaremos. La verdad es que si fuera por mi me tomaría toda la licoreria de este bar con solo olvidar lo sucedido en la casa. Hace más de media hora que llegamos y los chicos están intentando distraerme pero nada funciona, mi mente esta empeñada en regresar a ese momento.

—Una cerveza para mi—Dice Dany y voltea a verme—¿Winnie cariño..?

Me enojo conmigo misma por no hacer el esfuerzo para olvidad aunque sea esta noche. Pongo una gran sonrisa en mis labios y respirando más calmada digo.

—Lo mismo, una cerveza.

Los dos me miran alegres al verme sonreír y Tomy se va disparado a la barra para pedir nuestras bebidas.

—Relájate niña, él no esta aquí para verte.

Como si fuera tan fácil.

—¿Tú lo olvidarías? Si estuvieras en mí lugar claro.

Se queda pensativo por unos segundos para luego largar una carcajada.

—Esta bien ganaste. Pero eso no quiere decir que tengas que estar toda la noche con la cabeza puesta en ese momento. Disfruta con nosotras querida.

Y tiene razón. Tiene toda la maldita razón, además, ahora que lo pienso, hace bastante tiempo que no me emborracho como dios manda y la pregunta es...¿qué puedo perder? Al diablo Dominic y sus lindos y sexys encantos. Este es mi momento para brillar y divertirme junto a mis amigos ,si, esta noche pienso divertirme mucho, mucho.

Pasamos la siguiente hora y media bailando como locos, bueno, mejor dicho ellos se la pasaron en la pista moviendo sus caderas mientras yo baile dos veces con cada uno de ellos. Ahora están en la barra los dos pidiendo otra ronda de cervezas para nosotros. No tendría que seguir tomando, por la forma en la que todo me da vueltas y o en el simple hecho de estar contenta en este momento eso quiere decir que me encuentro borracha, muy borracha. Pero para eso precisamente vine para olvidarme de lo que sucede a mi alrededor y divertirme por esta noche.

Saco mi teléfono y veo que son las dos de la mañana, miro la pista de baile y veo como la gente, parejas mejor dicho, están moviéndose al compás de Five More Hours con la increíble voz de Chris Brown y me dan ganas de levantarme y moverme como se hacerlo. Y lo hago. Sin esperar a los chicos a que vuelvan me muevo rápidamente a la pista donde esta lo bueno y comienzo a moverme, si que lo hago. Muevo mis caderas de una manera sensual mientras cierro mis ojos y levanto mis brazos arriba. Me concentro solo en la música mientras bailo solo escucho la música, no presto atención a mi alrededor, no lo hago hasta que siento dos manos deslizarse sobre mi cintura y pegar mi espalda a un pecho amplio y caliente. De pronto abro los ojos para ver quien es el atrevido pero dicha persona me aprieta más a su pecho sin dejarme darme la vuelta.

—Oye...¿qué...?

—No sabia que podías moverte tan bien pooh

Me sobresalto cuando escucho su voz ronca en mi oído. Pero no me muevo, no tengo fuerzas ni ganas de hacerlo. Aunque mi mente me esta gritando que lo empuje y me aleje yo solo pienso en él cerca de mí. Hablándome al oído con esa voz tan sexy que tiene o pensar en....¡reacciona! junto toda mi fuerza de voluntad para alejarme rápido y darme la vuelta para mirarlo. Al girar lo único que logro es que mi cabeza de vueltas como loca mareándome feo.

—Cuidado campeona.—Me toma del brazo para estabilizarme.

—Suéltame.—Escupo.

—¿Y dejar que te caigas de culo de lo borracha que estas?

¿Me enamore de mi hermanastro? Daiana .B. CaravalloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora