They Dont Know About us.-

Capítulo 28.

Narra Demi.

Le ayudé a poner la mesa y luego comimos, tenía esa sensación de que aunque no tuviera empleo algo bueno caería del cielo para mi, luego de comer nos quedamos hablando en el sillón ni cuenta me di que se había pasado por completo la tarde no había ido a clases y eso para mí era realmente un problema.

Demi: son las 9, no fui a clases y creo que debería irme pronto.
tú: quédate a comer con nosotros.
Demi: se me hará tarde.
tú: ¿tarde para qué?
Demi: para volver.
tú: puedo llevarte a casa cuando me vaya a trabajar.
Demi: ¿segura que no es molestia?
Tú: claro que no, es un placer para mi.

Narra Demi.

Me quedé para cenar y en realidad solo pedimos una pizza y la comimos sobre el sillón de la sala mientras veíamos una película de ciencia ficción, rufus estaba sentado junto a ___ y él incesantemente intentaba arrebatar la pizza de sus manos, era algo extrañamente gracioso verlo intentarlo una y otra vez, ella lo regaño y tiernamente el bajo sus orejas y se echo junto a mi puso su asicó sobre mi rodilla y yo solo lo acaricie

tú: Hey... no lo mal acostumbres.
Demi: uy pobre rufus (le acaricio la cabeza).
tú: bueno él no puede comer pizza.
Demi: toda la razón.

Narra Demi.

Terminamos de comer y ella me pidió que la esperará, se daría una ducha y de inmediato volveríamos a casa, yo me quedé con rufus en el sillón y luego de un largo rato ella por fin apareció vestida con algo sumamente cómodo jeans una camisa roja y una chaqueta de cuero aparte de las Converse del mismo tono rojo de camisa, tenía el cabello completamente alisado y estaba suavemente maquillada me quedé viéndola fijamente y ella lo notó y se rió.

tú: ¿Qué pasa? (aún sonreía).
Demi: ¿Qué?
tú: ¿Por qué me miras así?
Demi: am...am... (se sonrojo).
Tú: ¿nos vamos?
Demi: am... si (se levanto del sillón) adiós rufus (le acaricio mientras tu apagabas las luces de la casa y cerrabas las ventanas).
tú: creo que ya cerré y apagué todo.
Demi: ¿entonces vamos?
tú: si vamos (tomaste las llaves saliste y detrás de ti salió Demi dejaste una luz encendida y cerraste la puerta en cuanto lo hiciste rufus se puso a llorar y rasguñar la puerta).
Demi: ¿Por qué hace eso?
tú: detesta quedarse solo.
Demi: ¿y por qué no lo llevas?
tú: cuando era más pequeño me lo lleve una noche y se arranco de mi oficina y de verdad nadie lo podía atrapar sí que desde entonces prefiero que se quede en casa.
Demi: entonces deberías pedirle a alguien que lo cuide, él es un buen cachorro y tú eres una mala dueña
tú: pues tal vez lo haga...