Un Muelle Lejos De Aqui

Capitulo 3: Gritadores/Screamers

-Y... ¿Y por que no se mueven?- dije mientras caminaba por la costa al lado de Chell y veía hacia los bosques

-Si se mueven, si te les acercas lo suficiente pueden atacar, es solo que no caminan. Por alguna extraña razón solo caminan durante la noche, por el día solo se quedan ahí temblando, si pasas cerca de ellos te siguen la mirada con la cabeza, hasta te pueden llegar a gritar... Pero siéntete seguro de que no caminaran hacia ti durante el día.-

-¿Por que solo están en el bosque?-

-No solo en el bosque, tienen la clara intención de venir por nosotros. Nuestra ventaja aquí es que son muy lentos... Pueden llegar a la costa si siguen pasando las noches y no hacemos nada para detenerlos.-

-¿Por que sabes todo eso?-

-Por que llevo aquí mas tiempo que tu-

-¿Cuanto tiempo llevas aquí?

-Aquí es...- dijo Chell en cuanto llegamos a esa zona de la costa,

-¿Aquí es donde tu despertaste?-

-Aja- asintió

Era una tramo como cualquier otro de la extensa costa, habíamos caminado un buen rato mientras yo contemplaba el lugar con mi nueva y enfocada vista, el hermoso paisaje del mar a mi izquierda y el tenebroso bosque con esas criaturas paralizadas a mi derecha.

El punto es que me había encaminado ahí solo para mostrarme algo interesante...

-¿Ves? Así es como lo se...-

En la arena habían cosas escritas. Cosas que ya no se podían entender por el tiempo que había transcurrido desde que se escribieron, pero había algo en grande que si que se entendía, "ALEJATE DE LOS GRITADORES" En mayusculas y con una gran flecha apuntando hacia el bosque, debajo y con letras un poco mas pequeñas estaba escrito lo mismo pero en ingles (ah de ahí que haya dicho Screamers).

Mientras yo contemplaba los escritos ella se dirigió a un arbusto cerca de los arboles y tomo dos palos de madera con la punta afilada (o lanzas por no ser especifico).

-¡Wow! ¿Y esto?- dije asombrado en cuanto atrape uno que me había arrojado Chell.

-Por precaución- dijo en tono despreocupado.

-¿Tu los afilaste?-

-No... Solo los encontré, en esta zona puedes encontrar muchas cosas útiles-

-¿Quien las puso ahí?-

-Ni idea... Por que crees que te digo que hubo gente aquí antes que nosotros...-

-¿Y a donde vamos?-

-Al bosque- dijo decidida tras ponerse en marcha.

-¿¡Que!? ¡No!- fui de tras de ella y me le puse enfrente impidiéndole el paso.
-¡Eso es suicidio! ¡Ademas tengo aun muchas preguntas que hacerte!-

-Luego te las respondo hazte a un lado.- Continuo caminando pasando despreocupada por un lado mío.

Y ahí estábamos... Adentrándonos cada vez mas a los bosques mientras yo preocupadamente le daba motivos para no seguir, pero Chell haciendo caso omiso a mis advertencias. Conforme avanzábamos habían cada vez mas y mas arboles, y la luz del sol entraba cada vez menos. Habían Gritadores en cualquier dirección a la que volteara, caminábamos evitándolos... Pero valla que era tenebroso el hecho de que nos siguieran con la mirada... Bueno con la cabeza... Pues no tienen ojos. Caminamos así por un buen rato y entonces...

-Es... Es enserio Chell estas cosas nos van a matar, ¿por que mejor no volvemos a la costa que es mas seguro y comemos gaviota asada? Pronto seremos cadaveres muertos ya fallecidos que morirán sin vida...- En eso Chell me puso contra un árbol con su brazo en mi cuello y la lanza apuntándome, quedamos frente a frente y amenazo...

-¡Ya guarda silencio ¿quieres?!, llevas diciendo puras tonterías desde que nos adentramos al bosque ¡y me estas volviendo loca! No se tu pero yo quiero irme de aquí y eso solo lo conseguiré buscando pistas... Así que si no vas a cooperar ve con uno de esos asesinos con anorexia a que te... ¿Eh? ¿Que miras?- Le confundió el hecho de que a pesar de que me estaba amenazando con la lanza yo me le quede viendo a la nada, acto seguido ella también volteo y me soltó.

-Sujeta tu lanza- me dijo mientras se alejaba lentamente.

Había un gritador justo frente a nosotros, a no mas de dos metros y medio.

Me sorprendí, pues no había visto a uno tan de cerca... Bueno si pero este no me estaba atacando... Su piel era color gris, la cabeza grande y con esas tres cuencas vacías (simulando ser ojos y boca) como cara y de estas chorreaba lo que parecía ser un poco de sangre, no era mucha pero si se notaba. Era en extremo delgado, se podían ver los huesos de su cuerpo, los brazos delgados y con solo tres dedos en las manos, dos como si fueran el indice y el meñique y el tercero como pulgar, este ultimo manchado de sangre, no era la primera vez que veía a uno con los pulgares manchados de sangre. O al menos eso creía que era, se veía tan espeluznante. Todos con la espalda encorvada o con aspecto de deterioro, algunos incluso se arrastraban, su respiración era muy resonante y seca, y no nos dejaba de seguir con la cabeza.

Chell comenzó a rodearlo lentamente sin dejarle de apuntar con la lanza.

Yo por supuesto también tome mi lanza y comencé a caminar alrededor de el, mas por estar cerca de Chell que por inspeccionarlo pero igual me veía con pinta de amenazante.

-¿Por que no huimos?- le susurre a Chell.

-Mira en sus pies-

Y ahí estaba, una botella sellada con un corcho, con lo que parecía ser un papel enrollado en su interior.

Chell buscaba pistas, cualquier cosa que nos diera una idea del por que estamos ahí, o el que debemos hacer para salir de ahí.

Y esa botella era la pista perfecta...

¿Pero que había que hacer para obtenla?

¿Esperar otra noche para que esa cosa caminara? O arriesgarnos a atacarla y que probablemente nos mate.

Mi atención estaba en la botella al igual que la de Chell...

Pero podía notarlo en ella... En sus manos... En el como se humedecía los labios con la lengua.

Al igual que yo...

Ella también tenia miedo.