My Adventure Book

Concierto

Faltaba poco para ver a mi ídolo, al amor de mis amores.

Estaba con los nervios de punta, ni siquiera había podido dormir esa noche, pensando que al otro día iba a estar en el concierto del hombre que cada mañana inundaba mis oídos con su majestuosa voz, con esa forma de darle esa personalidad, esa forma de Él en cada letra pronunciada por su hermosa voz, que te hacían llegar a sentir la melancolía de sus canciones, esas letras que no solo eran para su gran fama, sino las verdades que cada canción te decía, cada sentimiento oculto y cada tentación que en algún momento algunos de nosotros en nuestras vidas quisiéramos hacer.

Ese que alegraba mis mañanas, que entendía como nadie las letras de sus canciones, en pocas horas lo iba a ver y a gritar como toda una posesa sus canciones junto a Él, aunque al otro día no me saliera la voz, ese era Ricardo Arjona.

Hoy era el día, hoy lo iba a ver y como no dormí en toda la noche por los nervios me desperté a la 1 de la tarde y como rutina busque en mi repertorio de canciones en mi iPhone, contectarlo a la esterio, mientras sonaba en los altavoces mi canción preferida, Desnuda. Había entrado a la ducha y mientras el agua iba resbalando por mi cuerpo iba cantando.

"Desnuda que no habrá diseño que te quede mejor que el de tu piel ajustada a tu figura, desnuda que no hay un ingenuo que viste una flor seria como taparle la hermosura, desnuda que la naturaleza no se equivoca y si te hubiera querido con ropa, con ropa hubieses nacido, dejame llenarme de tu desnudez, para vestirme por dentro, aunque sea un momento..."

Mientras seguía la canción yo terminaba de bañarme, después de que me enjaboné el cuerpo, lavé mi gran melena pelirroja que me daba por la mitad de la espalta, cuando terminé de asearme, salí de la ducha, me secaba el pelo con el secador e iba sonando, Fuiste tú...

Terminé de secar mi pelo y mientras seguía escuchando sus canciones, me iba cambiando y como sabia que iba sudar mucho me puse unos shorts color crema, una franela holgada negra y mis Alls Star negros. Recogí mi melena pelirroja en una cola alta descuidada, cogí mis Ray-Ban, mi pequeña cartera y ahí eché lo más importante, mi entrada al concierto, dinero suficiente, una libreta, un marcador y mi celular. Bajé a comer porque ya eran las 2 de la tarde y su concierto comenzaba a las 6 pero el camino era un poco largo.

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Después que comí, salí de mi casa a las 5 de la tarde en la camioneta de mi hermano Tayler al Estadio Olímpico de Barcelona, El Lluís Companys, de la gran España. Cuando Tayler me deja en la entrada del Estadio quedo pasmada por la cantidad de personas pero como yo había ahorrado mucho dinero me había comprado una boleta VIP, para estar cerca de mi ídolo. Me apresuro y me coloco en la fija donde entran los que tienen las boletas VIP.

*7:30pm*

Ya estoy en mi lugar, esperando a que comience el concierto. De un momento a otro apagan las luces, todos a mi alrededor comienzan a gritar incluyéndome, se prenden las luces del escenario y comienzan los acordes de Te Conozco, se ve como poco a poco va saliendo detrás del escenario y comienza a cantar.

"Te conozco desde el pelo hasta la punta de los pies, sé que roncas por las noches y que duermes de revés, sé que dices que tienes 20 cuando tienes 23. Te conozco cuando ríes y tus gestos al amar, sé de aquella cirugía que a nadie le has de contar, sé que odias la rutina un poco más que a la cocina."

Me salen dos lágrimas de la emoción, todavía no lo podía creer, no creía que estaba a pocos centímetros de mi ídolo. El pone el micrófono hacia al público y todos en el estadio cantamos a puro pulmón.

"Dime si él te conoce la mitad, dime si él tiene la sensibilidad
de encontrar el punto exacto donde explotas al amar. Dime si él te conoce la mitad, dime si él te ama la mitad, de lo que te ama este loco que dejaste en libertad."

Mientras que el seguia cantando, me fijo que a mi lado hay un chico que antes no estaba ahí, seguro fue la emoción de ver a mi cantante favorito, pero ahora me quedo observándolo detenidamente y era un chico muy guapo, era más alto que yo, (pues soy pequeña), de piel blanca igual que yo, con barba de unos días, buen cuerpo, pelo cobrizo, llevaba arentes en cada una de sus orejas, nariz fina, unos labios carnosos y sus ojos, esos ojos verdes que parecían dos gemas, eran tan preciosos, no lo podía negar me había quedado embobada a tal punto que el chico me habló.

- Pelirroja, como te llamas? - me dijo con un tono de voz muy seductor

- Ehh... Me llamo Ann, ¿y tu Chico guapo? - estrechamos nuestras manos y yo le regalé unas de mis mejores sonrisas

- Me llamo Adam, un placer Ann - se estira y planta dos besos en mis mejillas, sentí como en ese momento mis mejillas ardían y podría asegurar que estaban del mismo color de mi pelo, luego se aparta y me susurra al oído.

- Te ves preciosa cuando te sonrojas - cuando me dice eso mis mejillas se encienden más...

-Graa.. Gracias - tartamudeo y seguimos atentos al concierto.

Pero ahora el estaba más apegado a mi y cantaba conmigo todas las canciones y hasta las bailabamos.

Llega un momento que hace un silencio total y comienzan los acordes de mi canción favorita, Desnudo... En ese momento Adam se pega más a mi y me susurra en mi oído.

- Esta es mi canción favorita y quiero dedicartela - besa mi mejilla y comienza junto a Ricardo Arjona a cantarme suave, lento y sensual en mi oído.

"No es ninguna aberración sexual,
pero me gusta verte andar en cuero; el compás de tus pechos, aventureros victimas de la gravedad, será por que no me gusta la tapicería, que creo que tu desnudez es tu mejor lencería,
por eso me gustas tal y como eres;
incluso es par de libras de más,
si te viese tu jefe desnuda y detrás, no dudaría en promover tu cintura, deja llenarme de tu desnudez, para afrontar los difraces de afuera de una mejor manera..."

Mientras los demás seguían cantando él y yo estábamos en otro lugar, un mundo donde solo existiamos él y yo, en una burbuja, y si, llamamen loca, pues me habia enamorado de un chico que apenas había conocido en pocas horas en este concierto, pero así pasó y mientras seguía el concierto él se acercó a mis labios y me besó. Me besó con tanta dulzura, saboriando cada parte de mi boca, mientras nuestras lenguas hacían una danza sensual que hacia que el momento fuera mas especial.

Nos separamos por falta de oxígeno y el junta nuestras frentes y me dice.

- Ese fue el mejor beso de mi vida...

- El mio también...

El me rodea con sus fuertes brazos y no me suelta hasta que termina el concierto.

En el momento, en que salimos del estadio el me pregunta.

- ¿Nos volveremos a ver, Pelirroja?

Saco de mi cartera mi marcador y cojo su brazo y le escribo mi numeró de teléfono en su ante- brazo.

- Esperaré tu llamada, Chico guapo - le doy un ultimo beso en los labios, me voy a lejando y el me grita.

- No lo dudes, Pelirroja...

Ahí, en ese maravilloso concierto, el concierto de mi ídolo, fue que encontré al chico de mi vida...