Salieron al estacionamiento, abordaron el auto y partieron con destino a la aldea de Ibuki. El trayecto fue tranquilo y agradable, las dos se sentían mucho mejor a pesar de solo haber dormido un par de horas.
Estaba a punto de amanecer cuando por fin Ibuki le pidió a Cammy que se detuviera a un lado del camino.
-Muchas gracias por todo- dijo Cammy después de apagar el motor -no sé cómo demostrar lo agradecida que estoy contigo. Sin duda ya eres una de mis mejores amigas-
-No tienes que agradecer Cammy, al final pudimos lograr nuestro objetivo y no cabe duda que gracias a ti he madurado un poco más, he alcanzado un nuevo nivel en mis habilidades; me has ayudado a darme cuenta de algo que nunca olvidaré -
-Parece que las dos estamos agradecidas con la otra ¿no crees? -
-Si eso parece - contestó Ibuki entre risas -Sin embargo aún queda un objetivo pendiente...-
-No quisiera arrastrarte a una situación tan peligrosa de nuevo Ibuki. Mis amigos son las personas más importantes para mí, no quisiera que algo malo te pasara -
-Yo también pienso así, mi familia y mis amigos son todo para mí. Es por esto que te quiero ayudar, ¿está claro? Si pudimos derrotar cada una a nuestro oponente, imagina que podemos hacer juntas. Además esta vez contaremos con la oficial. Así es que no hay manera en que no te ayude en tu nueva búsqueda. Por favor dime cuando sepas algo de información sobre Gill o tu hermana, yo también me encargaré de investigar, si descubro algo te lo haré saber-
-Sin duda eres una gran persona Ibuki, me da mucha alegría decir que eres mi amiga y que cuento contigo.-
Ambas se abrazaron, después de un momento Ibuki dijo:
-No olvides visitarme, aprovecha que estas de vacaciones; nos divertiremos te lo prometo -
-Puedes apostar que así será- dijo Cammy con una sonrisa
Ibuki bajo del auto, le guiñó un ojo a Cammy antes de cerrar la puerta y esperó a que su amiga se marchara. Cammy encendió el motor -¡Hasta pronto! - dijo y emprendió el camino de vuelta al hospital. Ibuki esperó hasta que el auto se perdiera de vista antes de ponerse en marcha. Cuando empezó a caminar en dirección a su casa algo la detuvo, alguien caminaba hacia ella entre la maleza.
-¿Quién está ahí?- preguntó Ibuki.
-Ya era hora de que regresaras, ¿no te parece?- resultó que era Yuuta quien salía de entre los árboles. En su rostro podía apreciarse la preocupación por la que pasaba.
-Me entretuve haciendo unas cosas... no te imaginas la aventura que acabo de pasar en este día- replicó Ibuki con sinceridad
-De hecho lo sé y en verdad puedo decir que lo has hecho de maravilla. ¡Felicidades! - al decir esto el semblante de Yuuta cambio por completo.
-¿En verdad lo sabes?- preguntó Ibuki extrañada, no podía creerlo
-Es verdad, bueno me he perdido algunos detalles pero si-
-Tú... ¿Estuviste conmigo?- Ibuki no sabía cómo tomar la noticia, su mejor amigo no la había dejado sola, no estaba segura si debía alegrarse por eso o no.
-¡Pues claro! No permitiría que mi mejor amiga se embarcará sola en una misión tan peligrosa-
-Vaya, no sé qué decir... estoy avergonzada, debí notificarle a Enjo en que me estaba metiendo antes de comprometerme con una misión. Si hubiera fracasado quien sabe que habría ocurrido con la oficial, Juri me habría matado y...-
-Vamos Ibuki. Has estado estupenda; parece que has demostrado cuan lista estas ¿no te parece? Digo, no todos los días le das una paliza a una loca, ni rescatas a una oficial de policía- intervino Yuuta
-Pudiste haberme ayudado... la pasé muy mal hace rato ¿sabes?-
-Nunca necesitaste mi ayuda Ibuki, al final tú misma te demostraste de que eres capaz; me alegra haber estado ahí para poder apreciar tal acontecimiento, estoy muy orgulloso de ti-
-Vaya, con que lo sabes- dijo Ibuki entrecerrando los ojos y acercándose un poco más a su amigo -¿No me vas a felicitar como se debe?- extendió los brazos esperando que Yuuta la abrazará. Y así fue; Yuuta se acercó a ella y la abrazó intentando ocultar el rubor que había aparecido en sus mejillas.
-¿Qué pasa?- parecía que Ibuki al fin se había dado cuenta, no tenía que seguir buscando entre miles de chicos hasta encontrar el indicado; él ya estaba a su lado y no se había dado cuenta.
Durante unos instantes que parecieron durar horas ambos chicos se miraron fijamente a los ojos, el sol estaba comenzando a salir; Ibuki se acercó un poco más a Yuuta, y él a ella. Al final sucedió, Ibuki sintió como un calor infinitamente agradable se extendía desde sus labios, llenaba su corazón y recorría todo su cuerpo. Ibuki sabía que a partir de ese momento todo cambiaría, sin embargo cambiar no es algo malo, puede ser que dé miedo, además ya había comprobado que estaba lista.
-Gracias por estar a mi lado siempre-
-Nunca estarás sola mientras yo esté aquí, estaré a tu lado siempre- dijo Yuuta abrazando a Ibuki con más fuerza.
-Fui una tonta por no haberme dado cuenta antes, te quiero mucho Yuuta- dijo Ibuki antes de besar nuevamente a su compañero.
Ambos permanecieron en ese lugar hasta que el cielo se hubo teñido de azul y el sol estaba en lo más alto, fue hasta ese momento que decidieron partir a la aldea, quizá habría mucho que explicar, quizá no; solo les importaba que estaban juntos, la idea de un posible regaño por parte de Sanjo o Enjo se había disipado de sus pensamientos, a pesar de que ambos habrían preferido pasar toda una eternidad en ese lugar pensando sólo en ellos mismos, la vida de un ninja era una vida muy atareada, llena de misiones y entrenamientos. Ya encontrarían el tiempo necesario para estar juntos.
¿FIN?
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Lazos de amistad
أدب الهواةEsta pequeña historia relata la aventura de dos de mis personajes favoritos de la serie street fighter. No es mi intención lucrar con estos personajes, mi deseo es compartir un trabajo realizado por mi, junto con el apoyo de amigos y familiares. Esp...