Una semana.
Eso era lo que había pasado desde aquella conversación con Peter.
Esa semana fue normal, no ocurrió nada importante. Solo que Zoe se estaba poniendo muy pesada con Brian, pero él pasaba de ella. Todos ya se habían enterado de lo ocurrido, y con todos me refiero a todos. Algunos decían que era mi novio, otros que era mi padre, y muy pocos que era mi hermano. Cada uno tenía una versión. Allí todo eran cotilleos, cualquier cosa que ocurra lo cotillearan. Últimamente se habla mucho sobre la nueva, vamos de mi. El fin de semana pasado Oliver se iba a quedar a dormir pero sus padres no le dejaron ya que tendría un examen, bastante raro en la segunda semana de clase. Ya se lo que pensaréis, que era una prueba inicial pero no.Pero me quedé contenta al saber que este si se quedaría, lo tenía todo planeado. Hoy era viernes y uno muy soleado. Oliver vendría a las seis para ir a la playa todos juntos y me encantaba la idea. Solo quedaban unas horas para ir a la playa y estaba eufórica. Salí de clase de matemáticas y fui hacia casa sola. Al parecer los demás se quedarían a hablar con no se quien. Corrí hacía casa pero me hicieron la zancadilla y caí de boca.
-Que torpe eres- escuche decir a la chica-. Os podéis ir, ya hablo yo con ella- unas chicas pasaron a la acera de enfrente y me giré para ver quién me había tirado.
-Zoe déjame en paz, no quiero problemas- dije mientras me levanba del suelo.
-No te levantes.
-¿Y que vas a hacer para impedirmelo?- añadí desafiandola mientras me sentaba. Llevaba unos días que iba diciendo cosas de mi, y no eran muy bonitas.
-Por favor no quiero hacerte daño- dijo con ojos llorosos. "¿Qué pasa aquí?"- Déjame que te grite y te podrás ir.
-¿Qué?
- ¡Serás asquerosa, como puedes hacer eso con "mi novio"!¡Te arruinare la vida!¡Jamás se irá contigo!- me empujó los hombros para que, puesto que seguía sentada en el suelo, volviera a caer.
Tras aquello fue con sus amigas, que reían por lo sucedido, y se marcharon. Me levanté lentamente, pues estaba dolorida y me encamine a casa mientras pensaba en lo ocurrido. "El otro día saliendo de el instituto ellas dijeron que si seguía así las pagaría. Ahora me acaba de decir que no quería hacerme daño.....Creo que se que sucede aquí". Llegué a casa más rápido de lo que esperaba y decidí dejar el asunto para otro momento. Vi que la casa estaba tranquila pero desde la ventana de mi habitación se veía una sombra. "¡Oliver!", pensé rápidamente mientras empecé a correr hacia la puerta de mi casa. Abrí la puerta y subí las escaleras para encontrarme con mi puerta cerrada. Me disponía a abrirla cuando una voz me asustó, pillandome por sorpresa.
-¡Hola Ange!¿Qué tal en la clase?- me di media vuelta para ver a Peter.
-Hola Peter, ¿qué haces aquí?- dije con una ceja alzada.
-Vine para quedarme un tiempo. Tan solo es temporal- dijo rascándose la nuca al ver mi cara pasmada. En ese momento unas manos se posaron en mi cara dejandome sin visión alguna.
-¿Hola?- dije sonriente.
-¿Palabra mágica? - añadió Oliver.
-Unicornio- añadí riendo.
-No no no, prueba otra vez princesita- unas cacarjadas sonaron.
-Por.....¿favor?
-Emmmmm, esta vez no- me quede pensando que decir pues no se me ocurría nada.
-No se me ocurre nadaaaa........ ¡Fingoustehs!
-¡Bien!-quito sus manos y le abracé, tras eso corrí con él a mi habitación. Cuando eramos pequeños nos inventamos varias palabras. Fingoustehs significaba amigo, loco, necesitado, amoroso, divertido, inseparable y majestuoso. Pusimos majestuoso porque leímos un cuento que al referirse al príncipe decía majestuoso.
-Tengo que prepararme para ir a la playa, ¿qué me pongo?- añadí abriendo el armario. Una risa se escuchó detrás mía.-¿De qué te ríes?
-De que pongas lo que te pongas estarás bien- me giré y le miré riendo de lado.
-Ok, pues vuelvo en un minuto- cogí un bikini y un vestido de playa cualquiera. Fui a mi cuarto de baño y mire el bikini con estampado de Chevron en la parte de abajo y liso en la parte de arriba. Me lo puse rápido, y tras eso salí para coger otro vestido de playa pues el que cogí era horroroso. Al salir un silbido me distrajo.
-¿No irás así verdad?- escuche a Oliver decir.
-¿Y por qué no?Así estoy bien- seguí buscando una vestido de playa, y encontré una camiseta que no llevaba desde hacía tiempo.
-Así vas demasiado bien,¿no has pensado en engordar un poquito?- miré su cara aguantando la risa.
-¿Te gusta esta camiseta?- añadí enseñandosela.
-Pues claro que si. Pontela ya y vámonos que seguro que ellos ya están- dijo dirigiéndose hacia la puerta.
-No creo, tenían que hacer una cosa en el instituto.
-¿Qué cosa?- encogi los hombros y me vestí.
-Oye,¿qué es eso?-cogió mi brazo y miró mi codo-. ¿Qué ha pasado?¿Cómo te has hecho ésto?- "Una chica que me hizo la zancadilla y me grito, pero no pasa nada porque ella, en realidad, no quiere hacerme daño."
-No se, ya sabes que siempre me doy golpes por todas partes- su cara expresaba desconfianza.- No saques más importancia de donde no la hay. Y ahora venga, que tenemos que preparar las cosas para irnos- los dos salimos y bajamos a la planta de abajo donde mi madre estaba preparando comida.
-Hola mi niña, ¿qué tal el instituto?
-Muy bien- "Pues claro que si, como iba ir mal. Hoy examine la dureza de el suelo y me ayudo una chica precipitando algo al suelo, yo."
-Me alegro, ¿puedes coger la bolsa de la playa? Así metes todo lo que vayáis a necesitar- dijo sin apartar la vista de la nevera. Fuí a por la bolsa y al volver a la cocina el timbre de la puerta sonó.
-Voy yo- salí corriendo hacía ella y la abrí rápidamente, aún que no me encontré lo que yo esperaba.-¿Quién es usted?
-Soy una amiga de Peter, venía a hablar con él- dijo mirando detrás mía. Era alta, morena de ojos verde oscuro, bastante guapa.
-¿Y qué tipo de amiga es usted? Porque, que yo sepa, una amiga no va tan arreglada a verte y tampoco lleva una ramo de rosas y una carta- la miré de arriba a bajo y confirme mis sospechas-. ¿Cómo te llamas?
-Cyntia. Tú debes ser su hermana, habla mucho de ti- no paraba de sonreír, parecía que le había dado un tic.
-¡Oliver, tu novia Cyntia vino a verte!- abrí la puerta y la invite a pasar. Divise a Oliver en las escaleras bajando rápidamente para pararse en seco delante de ella.
-Lo siento mucho, te traje ésto - le dio el ramo y la carta pero Oliver parecía no reaccionar.
-No tendrías que estar aquí- dijo serio.
-No quería hacerte daño- añadió agachando la cabeza.
-Pero lo hiciste- seguía serio, duro como una piedra, demasiado duro.
-A veces las personas nos hacen daño y nos decepcionan, ¿verdad Oliver?- él quería que le diera una oportunidad, y él tendría que dársela a ella.
-Cierto, necesito tiempo para pensar -Cyntia se lanzó hacia él y lo abrazó fuerte, luego se secó las lágrimas que empezaban a salir en su rostro y se marchó.
-Es guapa, y parece ser una buena chica.
-Y lo es, pero hizo algo que me daño.
-Ya somos dos- dije mirándole sería, él también me miró con ojos llorosos.Hacía años que no nos abrazabamos y la idea no me gustaba demasiado, pero él lo necesitaba así que le abracé y él me abrazo más fuerte.
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Leaving footprint(never say never)
Teen FictionCeleste es una chica divertida y cariñosa, pero dura .Ella llega nueva al instituto porque, tras lo ocurrido en su antigüa ciudad, sus padres deciden cambiar de aires. Cuando desprecia a las chicas "populares", ellas intentan hacerle la vida imposib...