Me levanté, como de costumbre, con el pelo a lo afro. Recordé que estaba sola así que decidí poner música. Aún en pijama, hice el desayuno y me lo tomé. Luego me arreglé para ir a la escuela y casi se me olvidó que había quedado para no ir sola de camino a clase. Me puse un vestido azul marino con pequeños pájaros blanco, un cinturon marrón y una chaqueta de piel marrón claro. Corrí hacia la esquina y espere allí a que llegarán. No tardaron mucho así nos pusimos en camino.-Y bueno....¿que pasaba ayer entre tú y Brian?- dijo Saly alzando una ceja.
-¿A qué te refieres?
- A cuando entre en tu habitación y estabais tan pegaditos. A eso me refiero- yo tampoco sabía que pasaba ni de que iba, pero lo averiguaria.
-No lo se, me iba a apartar cuando entraste- añadi seria.
-¿Enserio no lo sabes o es que no quieres saberlo? Porque, por lo que a mi respecta, si un chico se te acerca así es para darte un beso- los tres la miramos con ojos muy abiertos. ¿Un beso? Pero si lo acababa de conocer.
-Eso es imposible, Brian nunca le daría un beso a una chica. Recuerda que él no quiere nada de eso- dijo James seguro, y cuando termino me miró queriendo decir que no me ilusionara. Pero no iba a hacerlo.
-Mejor, porque no me gustan los chicos que te besan y te dicen que te quieren nada más conocerte. Es muy precipitado decir esas cosas si no conoces bien a la persona.
Dejamos ese tema ahi y nos pusimos a hablar de otras cosas. Al parecer después de que sacaran a todos de la clase ayer, se difundió el rumor de que me había mudado porque me habían acosado. No era totalmente cierto. Pero los detalles no importaban, lo que importaba era que no sabía de donde habían sacado eso. Solo la directora, el jefe/a de estudios y pocos más podían ver mi historial. Era muy confidencial aquella parte, así que alguien con poder en el instituto se había ido de la lengua. Eso me enfureció mucho, ¿donde estaba el respeto por la intimidad? No pude pensar más en eso pues la profesora entró en clase. No recuerdo cuando entré allí, me había sumado tanto en mis pensamientos que no me di cuenta.
Llegó la hora de almorzar y nos sentamos en una mesa apartada. Miré al rededor y vi a una chica que estaba sola, tenia gafas, un moño y llevaba ropa ancha. Estaba leyendo un libro de ciencia, me sonaba mucho. ¡Pues claro! Estaba en mi clase de química, siempre estaba sola. Me dio grima, pues yo siempre estuve así. Me disponía a hablarle cuando James me llamó. "Luego le hablaré" me dije.James me llamó para preguntarme a que hora venían a mi casa. Les dije a las siete y se pusieron a decidir que música pondrían. El tiempo pasó rápido y tocaba química, por lo que hablaría con aquella chica. El profesor no estaba, habia faltado y nos dieron la posibilidad de ir a la biblioteca. Ella se fue así que la seguí sin dar explicación alguna a mis amigos. Llegamos a la biblioteca y se sentó en una mesa alejada. Me acerque y me senté a su lado. Ella me miró extrañada.
-Hola me llamo Celeste.
-Todos saben como te llamas- ¿enserio? "Que vergüenza" pensé. Empecé a sonrojarme pero no era momento.
-¿Y tú como te llamas?
-No te conviene hablar conmigo. Te darán por rara o empollona-no pude evitar reírme a carcajadas.
-Eso me da igual- dije aún riendo.
- Pues no debería. ¿Quieres que te den por una chica que le encanta estudiar y saca sobresalientes?- dijo mientras me miraba segura.
Empecé a reírme sin más. Yo era de ese tipo de chicas, así que no sería mentira. La bibliotecaria nos miró desapobradamente así que me tape la boca mientras reía.-Sí piensan eso no sería mentira-. Abrió mucho los ojos y saco una reve sonrisa. ¡Por fin sonreía! Pero eso terminó antes por culpa de aquél chico.
-Hola preciosa- era uno de los "populares". ¿Cómo se llamaba?........ Ah sí, se llamaba Brad.
-Eh....permiteme que te corrija, pero somos dos- añadí seriamente. Brad y sus amigos rieron.
-¿De verdad piensas que ella es guapa? Mírala, incluso lleva gafas-. Eso hizo que mi sangre hirviera de rabia. Yo también tenía gafas pero las usabas poco. Una idea se pasó por mi mente. Saqué mis gafas y me las diposite en el tabique de mi nariz y sonreí a aquella chica.
- Mirá el que habló. El que lleva pantalones grandes. ¿Que pasa?¿Tu hermano mayor te los dio para cuando crecieras?¿O es que mami no te arregló hoy?- hice un puchero mientras lo decía, vi como sus amigos reían.- Creo que si empezara a subertelos te llegarían a los sobacos- me reí al imaginarmelo.- Ah y una pregunta ¿se te olvidó cortar el césped?- dije señalando su pelo que medía aproximadamente 15 centímetros de altura en la parte superior. Se que no era muy grave lo que decía pero el chico tenía muy pocas cosas malas.
-Mira preciosa ¿eso es lo único que sabes decir?- en realidad no pero solo quería burlarme un poco de él.
- Mira chulo, como me vuelvas a llamar preciosa me las pagas.
-¿A si? ¿Y que me vas a hacer preciosa?
-Oh.....ya verás-dije mientras reía levemente. Me levanté y me acerqué a él. Miré a todas partes, no había nadie. Mi puño golpeó su nariz sin previó aviso y empezó a sangrar un poco. Sus amigos miraron algo sorprendidos y se lo llevaron pues no querian problemas. Me senti mal por él pero se lo tenía merecido. Volví a sentarme y me miré el puño, lo tenía dolorido.
-¿Por qué estás sola?- dije cuando ella cogió mi mano para examinarla.
- Ya lo sabes.
-No todos aquí son así, seguro que hay alguien con quien hablas.
-¿A parte de ti ahora?- dijo con una leve sonrisa, yo aseguré con la cabeza.
-Bueno..... Hay un chico con el que a veces voy a casa, es del instituto.
-¿Así? ¿Y como se llama?
-Tú ya lo conoces- añadió riendo.- Es Brian.- ¿Brian?
-Ah, claro. Él va hacía el centro de la ciudad- dije mirándome los nudillos, estaban muy colorados.
-Sí, es muy bueno siempre conmigo- no sabia si decírselo pero....¿por qué no?
- Oye esta tarde vienen a mi casa para bailar, cantar y esos rollos ¿Te animas a venir?- me miró preocupada, no puede evitar reír.- No hace falta que cantes ni que bailes.
-Esta bien, iré. ¿Dónde vives?
-No te preocupes Brian ya lo sabe, podéis ir juntos.
-De acuerdo. Y gracias por todo imcluido lo de Brad, le quedará un marca por unos días- se fue de allí y el timbre tocó.
Estaba en la puerta del instituto esperandoles. Vi a Brian marcharse con mi nueva amiga, los dos se despidieron de mi con la mano. Los demás llegaron algo tarde, así que pregunte que había pasado.
- Es que verás.......-se miraron sonrientes- Luego lo verás.
Me bastó pues quería contarles lo de Brad. Se rieron conmigo nada más empezar. Tras eso ingresamos cada uno en su casa, y empece a preparar todo para por la tarde. Pasó una hora, y me quedaba tiempo para relajarme un rato. O eso me creía yo. Tocaron al timbre y cuando abrí eran ellos. Los recibí con una gran sonrisa, pero era extraño estaban muy tristes.
-¿Qué ocurre?
- Lo sabemos todo.- ¿todo?, no sabía a que se refería Sandra- Sabemos por qué te mudaste aquí. Está mañana tenían tu ficha en la mesa de la ayudante de secretaria. Cuándo miré de reojo vi un papel de la policía y una declaración de tus padres de que.......habías intentado suicidarte.
-¿Qué?¡No tenias derecho a ver! ¡Es privado!- Estaba enfadada, no más que eso estaba furiosa.
-Eso da igual Celeste. Lo que ahora es importante es que te intentaste suicidar- Brian me miró triste, empecé a llorar. No recordaba bien aquel día.
-No, nunca lo intento.
Hola lectores, ahora mismo no se si seguiré con la historia. Quizás la siga por solo terminarla, pero a lo mejor la deje. Publicaré unos capítulos más para que sepáis que pasó en realidad el día que supuestamente Celeste se intentó suicidar. Besos :-*
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Leaving footprint(never say never)
Novela JuvenilCeleste es una chica divertida y cariñosa, pero dura .Ella llega nueva al instituto porque, tras lo ocurrido en su antigüa ciudad, sus padres deciden cambiar de aires. Cuando desprecia a las chicas "populares", ellas intentan hacerle la vida imposib...