Mi medio limón ❝Len x Luka x Kaito❞ || En edición ||

~Capítulo 6~

En medio del camino se puso a llover. Llegaron a la casa de Len empapados. Luka se sentó en el sofá.

-Odio las citas... son un asco.

Len se sentó a su lado.

-Ja, eso es porque no has tenido una de verdad.

-...

-Oye.

-¿Qué?

-Sal conmigo.

-¿Eh?

-Yo te mostraré como es una cita de verdad.

-No gracias.

-Oye.

-No quiero tener una cita contigo.

-¿¡Huh!? ¿¡Por qué!?

-Porque eres un niño irritable.

-Tss, he dicho que tendremos una cita y tendremos una cita, ¿entendido?

-No.

-Oye, ya sabes lo que pasará si no haces lo que te digo.

-¿¡Por qué diablos quieres tener una cita conmigo!?

-¿Eh? No lo sé, solo quiero.

-Tss...

-Este viernes.

-Lo que tú digas...

-Je.

-Oye...

-¿Qué?

-Préstame ropa, tú también deberías cambiarte.

-¿Eh? Ah, claro. -Miró a Luka, que iba toda empapada. -Que lástima que no lleves una camiseta blanca-- -Luka le dió una patada en la cara. -¿¡Pero qué te crees que haces!?

-Tss, maldito pervertido.

Len se levantó.

-Voy a por ropa.

Entró y salió de la habitación con un pijama.

-Toma.

Se lo lanzó.

-Menos mal, hoy me has dado el pijama entero...

-Hoy hace frío.

-Voy a cambiarme.

Luka se fue al baño. Len se quedo en el comedor, ya estaba con el pijama puesto. Se tumbó en el sofá y se tapó con una manta, y poco después se quedó dormido. Luka salió con una toalla en la cabeza secándose y el pijama ya puesto.

-Oye Len, de paso me he duchado... -Se dió cuenta de que el chico estaba durmiedo. -¿Len?

Se puso delante suya y le tocó una mejilla, el hizo una mueca de molestia, ella soltó una risilla. El rubio se giró.
-Len despierta, aún no puedes dormir.

El chico se dió la vuelta otra vez, ahora la miraba, y se despertó.

-Luka... no me molestes.

-Pero aún son las 10 y no hemos cenado.

-No tengo hambre, tengo sueño.

-¿Pero qué estás diciendo?

Se incorporó.

-Vamos Luka.

La cogió de los brazos y la "tiró" sobre él, haciendo que se sentase encima suya.

-¿Q-qué haces? -Len puso su cabeza en el hombro de Luka. -¡Oye Len, quita de encima! -De repente se dió cuenta de que se había dormido. -¿¡Cómo puedes dormirte así!?