Allí estaba yo, libro en mano pero en vano,
reflexionando sobre una vieja amistad
que de pronto se me ha dado por extrañar.Él no fue alguien importante para mi,
pero sí alguien con quien he reído
y no recuerdo si alguna vez, llorado.
Mi mente comenzó a pensar (¡Qué milagro!)
¿Él se acordora de mi así como lo hago yo,
o se habrá olvidado como supongo muchos otros han hecho?Aquí estoy yo, con el vacío de la incertudumbre.
La habilidad de,
aunque a veces buena,
poder utilizar mi imaginación.Quizá no councerdes conmigo,
y para ti estos versos no son más que palabras sin sentido.
Pero también me gusta pensar que tal vez tu eres aquel amigo.
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No sé cómo nombrar un libro de poesía
PoetryTan sola me encuentro que solo el papel puede escuchar mis lamentos.