Requiem para un buen amigo

56 3 0
                                    

¿Me preguntas cómo era mi amigo?
Bueno, él tenía el cabello negro,
Negro y sucio como el petróleo,
Nunca se lo lavaba cuando estaba de malas,
Y así es como siempre estaba

Sus ojos estaban bien secos;
O por lo menos eso él decía.
Ya que siempre estaban cerrados.
En cuanto a su boca,
Antes de estar morada,
Siempre estaba cerrada.
Él se ahogaba en sus pensamientos,
Quizás si los hubiera vaciado con alguien
Yo no estaría aquí,
Y él no estaría muerto.
Sus labios estaban secos y partidos.
Él tenía una chica,
Pero él nunca tuvo algo tibio.

Su cuerpo era muy flaco,
A penas se podía a sí mismo,
Sus rodillas le temblaban cada vez
Que su fe se veía quebrada

¿Que si me dejó herencia?
Mi buen amigo me dejó sus manos,
Su macabro arte,
Hacía hermoso lo más trágico.
Quizás era lo único bueno de su persona.
Así como moría su alma
Se desgastaba su cuerpo,
Pero sus manos nunca,
Nunca inclusive el día de su entierro

¿Qué si lo recuerdo con nostalgia?
¡Ja! Lo recuerdo con lástima.
Cada día me alegro más que haya muerto.
Pero también me alegro que haya vivido,
Porque gracias a él soy lo que soy.
Pero ahora soy tan distinto a él
Que ya ni puedo decir que él era yo.
Pero gracias él estoy donde estoy,
Escribiendo un poema de su muerte
Con sus propias manos,
Cocidas a los brazos de un hombre mejor.

(Ya no me caben sus zapatos gracias a Dios)

Muerte a los madrigalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora