Ángel
Bajaste,
Milenaria.
Y solo cuando estaba
En el peor momento de mi vida,
Te vi.
Y solo cuando te vi, supe qué era
Tener la soga al cuello
Bajaste, ángel
Con tus hermosas alas,
Aquellas que hasta el día de hoy me parecen quebradas.
Con tus locas vendas en las muñecas,
Que guardan el secreto con tanta sutileza,
Con tu rubio pelo,
Con el hermoso detalle bajo tus ojos,
Con tu callada mirada,
Con tu aún más callada boca,
Con tu maldita sutileza
E inaccesibilidad
Porque tienes la extraña esencia
De ser imposible,
La misma que me hizo pensar,
En el peor momento de mi vida:
¿Qué demonios hago aquí?
Estaba en el camino a tu luminiscencia
Ángel te aprisioné equivocadamente
En este hueco que tengo por corazón
Y ahora me cuesta trabajo dejarte ir,
Porque en el camino a tu luminiscencia
Me di cuenta de que tu vestido se volvía negro.
Y por más que lo intente
Esa luz que tanto amaba, se apaga.
Y listo. Está hecho.
Te vas, y puedes irte.
Ya has hecho mucho daño.
Te vas, y no sabes que aún no te dejo ir.
Oh ángel, vuela libre,
Vuela hasta chocar con el techo
Y así verás que tan atrapada te tengo
(Aunque no quiero),
Y a pesar de que quieras
Hacer de este hueco un corazón,
No podrás,
No con el vestido negro,
Pero te juro,
Que haré lo posible
para sacarte luego
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Muerte a los madrigales
Poesiallevo escribiendo esto desde el 2011... ¿Por qué demoro tanto? Creo que es porque se escribe solo, se abre cuando se le da la gana, me tortura cuando busca un poco de placer. Pero aún así me agrada. La portada es de una señorita de Serbia que me di...