Amor Desconocido [Furry/Yaoi]

━•°•°•❈𝑪𝒂𝒑𝒊́𝒕𝒖𝒍𝒐 𝑽𝑰❈•°•°•━━

Kuno fue a verse con su padre mientras yo me dirigía hacia la biblioteca para buscar algunas cosas que no encontraba en internet. Mi novio había decidido a fin de cuentas ir a la casa de sus padres y verse con él. Al llegar a la biblioteca acompañado por mi novio, nos dimos un beso y nos despedimos. Luego de estar casi durante medio día en la biblioteca, al llegar a casa quería y encontrarme con mi amado quería que me contara como le había ido, pero por lo visto las cosas no salieron como se esperaban.

—Hola amor, ¿qué tal te fue con tu padre? —pregunté dejando mis libros sobre la mesa.

—Pues... se supone que hubo reconciliación y todo amor pero... —suspiró derramando algunas lágrimas— Mi padre... ¿Te contaré todo mejor, de acuerdo?

—De acuerdo. Pero antes amor, ¿puedes decirme el nombre de tu padre? Tengo curiosidad por saberlo ya que nunca me has hablado de él. Ayer te iba a preguntar pero no pude. Oh, y también el de tu madre.

—Claro que sí —dijo él y prosiguió— Mi madre se llama Rose Izumi y mi padre se llama Iwao Izumi.

—Iwao, Iwao... —pensaba despacio tratando de recordar algo—¿dónde he escuchado ese nombre antes? Me suena un poco familiar. El único Iwao que conozco es... ¡Oh, no! Espero que no sea el mismo... —pensaba mientras Kuno me contaba cómo le había ido con su padre.

Y siendo muy explícito en la conversación, Kuno me contó todo detalladamente con pelos y señales tras haber hablado con su padre:

—¡Hijo, estás bien! No sabes cuanto me alegra verte, estaba muy preocupado por ti —decía el lobo maduro abrazando a su hijo.

—¿De verdad papá? ¿Lo dices en serio? —dijo el lobo menor con algunas lágrimas en los ojos tras escuchar a su padre.

—Claro que sí. La verdad jamás he estado tan feliz de verte, duraste casi cuatro meses perdido... ¿Estás bien?... ¿Qué tal has estado? Preguntaba por ti en la universidad pero nadie me decía nada sobre ti.

–Estoy bien, papá. La verdad todos en la universidad saben lo que pasó entre ambos y preferí que no te contaran nada. Además, ¿por qué no habías llamado antes? —preguntó curiosamente mientras lo miraba.

—Sumado a tanto trabajo que tenía... la verdad hijo fue que me sentí decepcionado y no quise volver a saber de ti... Pero luego me sentí muy mal por lo que hice y aunque se que fue algo tardío, decidí llamarte.

—Lo bueno es que ya estamos juntos nuevamente papá. Mamá ¿está trabajando no es así?- le preguntó emocionado el joven.

—Hijo, la verdad es que a tu madre desde que le encargaron un proyecto para construir un megacolegio ya no puede venir como antes y últimamente ha estado muy ocupada. Para no tener que viajar todo el tiempo, decidió quedarse a vivir en casa de tu tía Sakura y venir solo los fines de semana. Ayer por la tarde se fue.

—Deseaba verla y que viera que estoy bien —dijo suspirando después.

—Ella cada vez que venía esperaba recibir noticias tuyas. Lamenta mucho el cómo te trató, día y noche pensaba en ti cuando no estabas presente y la verdad me alegro que estés bien, hijo. Oye, pero... cuéntame, ¿dónde has estado? No te veo mal, ni herido, ni nada –decía aquel lobo revisando detalladamente a su hijo.

—Es que... he estado con un amigo papá.

—¡Oh, es maravilloso! Bueno, los amigos están para eso para ayudarte en las buenas y en las malas, querido hijo.

—Bueno... papá... la verdad es que... muchos de mis amigos cuando supieron que me echaste de casa me abandonaron porque pensaron en que hice algo completamente mal. Entonces, me fui a la playa a desahogarme y conocí a un chico que me ha ayudado bastante a pesar de que al comienzo no sabía si querer su ayuda o seguir solo.

—¿Eres inseguro como siempre no es así hijo? —preguntó sonriendo. 

—La verdad si papá, jeje —respondió con algo de confianza.

—Te confesaré que me siento muy solo sin tu madre, hijo. Pero no creas que por eso te llamé, eres lo único que tengo en este mundo después de tu madre y no quiero perderte.

—Awwwwww... gracias papá... Pero... necesito que sepas a-algo... —dijo Kuno balbuceando un poco.

—Espera busco un poco de té, así conversamos mejor —dijo mientras preparaba el té para luego traer dos tazas e irlo repartiendo—¿qué quieres decirme?

—Papá... lo que quiero decir es que yo...

—Dilo con confianza, hijo —dijo el lobo mayor con sus orejas levantadas esperando escuchar la respuesta de su hijo.

—Está bien... lo que quiero decir es que... soy homosexual y tengo novio, papá.

—¡Kuno!  ¡Suficiente tengo con aceptarte con que seas homosexual! ¿cómo es posible que yo me preocupe por ti y me salgas con que ahora tienes novio? —exclamaba el padre mientras la taza de té que servía rebosaba todo y se derramaba, lleno de cólera. 

—Pero papá, sólo escucha...

—¡No Kuno! No insistas, no quiero que el vecindario se entere que tengo un hijo homosexual comprometido. ¿Qué dirán de ti en la universidad? Se burlarán de mí en el trabajo. Kuno, no puedo aceptar esa relación; piensa un poco en lo que dirían de ti si te vieran con ese chico. La verdad no quiero que esto se sepa y en la calle compórtate como un macho de ahora en adelante.

—¡Grrrr... en la universidad me apoyan! ¡No tienen problema en aceptarme! —exclamaba él también con cólera— ¡Papá, te odio! ¡Creí que me comprenderías! –exclamaba el lobo menor corriendo y cubriendo su rostro en dirección hacia la puerta.

—¡Hijo, espera por favor! No te vayas... ¡Kuno, regresa!

—Papá, jamás me separarás de Kano. ¡No dejaré que lo hagas! —gritaba el chico mientras corría.

Así fue como Kuno me contó la conversación que tuvo con su padre. Él tuvo una gran incomodidad con lo que su padre le había dicho, pero yo estaba más sorprendido por saber el nombre de su padre.

—Kano, Kano... ¡Kano! ¿Qué te pasa? —gritaba Kuno mientras trataba de asimilar todo lo que me dijo.

—Es que... Kuno no se como tomarlo. La verdad es que me sorprende que tu padre haya dicho eso. No me lo esperaba.

—Si, creo que está en contra de nuestra relación, pero eso no importa. Lo mejor será que no vuelva a buscarlo ni tampoco a hablar de él, soy muy feliz contigo. Y ahora, me siento algo cansado así que me voy a dormir al sofá.

—Si lo prefieres podrías dormir mejor en mi cama, Kuno. Ya somos novios, hemos hecho el amor un par de veces y me has mostrado que eres un libro abierto así que has dejado de ser un completo desconocido para mí.

—Gracias mi príncipe, eres lindo. Lo que dices significa bastante para mí porque sin conocerme totalmente, poco a poco me fuiste descubriendo. Ahora sí, hasta mañana. Te espero en la habitación para dormir juntos, por favor no tardes —dijo después de darme un beso para luego subir tras de él y acostarnos juntos con nuestras colas entrelazadas.

—Duerme bien, mi amor —le dije para luego apagar la luz de la lámpara mientras me quedaba pensando un poco— ¿Iwao Izumi es el padre de Kuno Izumi? Creo que esto se va a poner color de hormiga...

Después de esto, cerré mis ojos e intenté dormir un poco. Sin embargo, no dejaba de estar preocupado por lo que ocurriría después.